Los actores de Arte Para El Alma dicen que con permiso de la dueña de un establecimiento, en el centro de Bogotá, estaban filmando la escena de un video musical en donde ocurría un robo como parte del libreto.
Según su versión, estaban en la entrada del local grabando lo que sería un atraco, utilizando un arma de utilería y con unas capuchas blancas. Repitieron la escena unas tres veces cuando llegó la Policía alertada por un vecino, quien pensó que estaban cometiendo un atraco a mano armada de verdad.
Ellos dicen que cuando los oficiales de la Policía Metropolitana arribaron lo hicieron accionando sus armas de fuego. Fue ahí cuando uno de los actores resultó herido mientras corrían para defenderse. Eso ocurrió a eso de las 4 de la tarde en un restaurante ubicado en la calle 20 con carrera sexta, donde planeaban un cortometraje musical. "Hicimos unas tres pruebas y en la última llegaron los oficiales apuntándonos. Nos decían que bajáramos el arma".
Los actores dicen que sí habían pedido permiso para filmar el video. Foto:Archivo particular
El joven que tenía el arma la botó al piso para mostrar rendición, pero dicen que la Policía reaccionó realizando tiros. "Yo lo que hice fue meterme más al local para cubrirme. Mi otro compañero se quedó paralizado". El joven actor más afectado fue , al parecer, porque le cayeron esquirlas. "Él se salvó de milagro", dijeron sus compañeros de trabajo.
No obstante, hay testimonios encontrados porque los dueños del restaurante dicen que en ningún momento habían autorizado que se hiciera la grabación, que este, de hecho, ya estaba cerrado. El coronel Edwin Castiblanco dijo que lo que vieron fue a dos personas que iban saliendo con máscaras y lo que parecían ser armas de fuego en sus manos. "Los policías les advierten que arrojen las armas realizando llamados de alerta, los cuales no son atendidos por los ciudadanos. Ellos seguramente se asustaron, no alzaron las manos y seguramente por eso el oficial realizó el disparo".
La Institución dijo que reaccionó ante las voces de auxilio por parte de una ciudadana, la cual le informa al cuadrante que sujetos encapuchados se encuentran hurtando en un establecimiento abierto al público.
El cuadrante se dirige de inmediato al lugar de los hechos y al llegar encuentra a personas encapuchadas las cuales hacen caso omiso a la orden de policía de bajar el arma que tenían en las manos, por lo cual para salvaguardar su vida y la de los ciudadanos, los uniformados dicen que se ven en la obligación constitucional de usar sus armas de dotación de manera, con el fin de controlar la situación.
Del procedimiento resulta una persona con una leve lesión al parecer por una esquirla. Se logró evidenciar que los ciudadanos se encontraban realizando un video sin autorización de los dueños del establecimiento y sin informar a ninguna autoridad istrativa ni de policía del tipo de escenas que se iban a realizar poniendo en riesgo a ciudadanos y su integridad propia.
El ciudadano es trasladado al centro médico asistencial donde se le atiende por parte del personal médico. La Policía realiza entrevista a trabajadores, propietaria del establecimiento público y a testigos, quienes informaron del posible hurto que se estaba cometiendo y por el cual el cuadrante lo atendió.
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