Murió Ana Luisa Camacho, la cofundadora del inolvidable ponqué Ramo y Chocoramo
La mujer estuvo detrás de la idea del ponqué que se volvió una insignia en Colombia.
Ana Luisa Camacho, cofundadora de Ramo. Foto: Archivo particular.
PeriodistaActualizado:
Ana Luisa Camacho murió. La boyacense fue la cofundadora de la empresa de alimentos Ramo, productora del conocido Chocoramo. Junto a su esposo Rafael Molano Olarte crearon la compañía que se ha mantenido vigente a lo largo de los años.
(En contexto: Productos Ramo S.A., una receta familiar que Rafael Molano Olarte convirtió en imperio).
Falleció a los 97 años, en Bogotá, tras una vida marcada por el emprendimiento.
Camacho, nacida en Garagoa, Boyacá, estudió secretariado comercial. Fue secretaria de la Presidencia de la República, en el gobierno de Mariano Ospina Pérez, y también fue secretaria en la Presidencia de Bavaria, donde conoció a su esposo con quien tuvo ocho hijos: Mauricio, Rafael Ricardo, Claudio, Rodrigo, Pilar, Germán, Juana y Juan Carlos.
La mujer detrás de Ramo
Ramo nació en 1950, de la mano de la receta que Mercedes Olarte, madre de Rafael Molano, le enseñó a doña Ana Luisa.
"Mi papá recordaba que su mamá siempre que lo visitaba le traía unos ponqués deliciosos y que un día se le ocurrió que podían comercializarse. Le pidió, entonces, a mi abuela que le enseñara a mi mamá a hacer las tortas", contó Mauricio Molano Camacho, su hijo, en una charla pasada con EL TIEMPO.
El Chocoramo fue idea de un hijo de Rafael Molano, quien empezó vendiendo en su lugar de trabajo los ponqués que su esposa le preparaba y posteriormente fundó la empresa Ramo, una de las más importantes del país. La base de este delicioso ponqué es el Gala. Foto:Ramo
Así, la señora Ana Luisa le preparaba el ponqué a Molano para que fuera su postre en el almuerzo cuando trabajaba en la cervecería.
Lo que empezó como una receta familiar se transformó en uno de los productos insignias de la marca colombiana.
Los compañeros de trabajo de Molano quedaron encantados del ponqué y le comenzaron a hacer encargos. El matrimonio decidió entrar de lleno al negocio de las tortas que vendieron puerta a puerta en sus primeros años.
Ana Luisa Camacho y Rafael Molano, los fundadores de Ramo. Foto:Ramo
A la señora Ana Luisa también se le debe el nombre de la empresa, pues utilizaba papel de seda en forma de ramo de flores para empacar las tortas que, en principio, hacían en la tina de sus hijos.
Por el éxito del ponqué, trasladaron la empresa del hogar a una planta en el sector de San Andresito, en Bogotá, durante la década de 1960. Con batidora y horno, dieron los primeros pasos.
Luego, establecieron plantas industriales en Antioquia, Mosquera y otros partes de Colombia.
En 1972, lanzaron al mercado el popular Chocoramo, una variación del ponqué original que preparaban los esposos. La idea le surgió a uno de sus hijos al bañar el ponqué con chocolate.
(En contexto: Olimpo, el pastelero tras la receta del Chocoramo).
A partir de allí, diversificaron la producción, edificaron otras plantas, generando más de 1.000 empleos en todo el país.
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"Mi madre supo sentar las bases de la producción, la economía y la calidad que caracterizan los productos Ramo y fue también quien estableció los principales parámetros iniciales del control de costos en la naciente empresa familiar, a la vez que educaba a sus ocho hijos y desarrollaba una labor social y comunitaria, que siempre fue efectiva y silenciosa, pues nunca buscó protagonismo", expresó Mauricio Molano, en 2020, durante el lanzamiento de un premio en honor a doña Ana Luisa.
'Hoy Ramo está de luto'
Bernardo Serna Gómez, presidente de Productos Ramo, lamentó el fallecimiento de la "la heredera y guardiana de la receta familiar secreta del Ponqué Ramo, transmitida por las mujeres de la familia de generación en generación".
Ramo lamentó el fallecimiento de Ana Luisa Camacho. Foto:Ramo
La compañía se solidarizó con sus familiares y extendió condolencias a sus hijos, nietos, amigos y allegados.
"En Productos Ramo siempre la recordaremos con respeto y iración y honraremos su memoria, promoviendo acciones que nos permitan seguir viviendo sus valores, comprometidos con la labor social, el emprendimiento y el compromiso con quienes la rodeaban, su región y el país", afirmaron.
Rafael Molano, su eterno compañero en la travesía por crear Ramo, murió en 2014.
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