Editorial
Incendios en Los Ángeles: ¿qué tan graves son hoy 17 de enero?
Las autoridades continúan combatiendo las llamas en el condado de Los Ángeles.
Los bomberos trabajan para extinguir el incendio de un edificio de apartamentos en Los Ángeles. Foto: JOSH EDELSON / AFP
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Los feroces incendios en el condado de Los Ángeles, en California, siguen amedrentando a las autoridades y a los habitantes, pero hay buenas noticias. El incendio de Palisades, el más grande del área, se encuentra ahora contenido en un 27 por ciento.
Según funcionarios del Departamento de Silvicultura y Protección contra Incendios de California (Cal Fire), no ha habido crecimiento adicional de este foco de incendio en las últimas 72 horas, lo que representa un avance significativo en el control de la situación, tal como detalló CNN.
Durante una reunión comunitaria el jueves, Christian Litz, jefe de operaciones de Cal Fire, explicó que los bomberos continúan utilizando tecnología infrarroja para detectar puntos calientes en el perímetro del incendio. "Estamos trabajando arduamente para asegurarnos de que todas las fuentes de calor estén completamente extinguidas", señaló Litz.
En el terreno, más de 5.000 bomberos se sumaron al esfuerzo para combatir el fuego. Entre ellos, equipos internacionales de Israel, Canadá y México, quienes llegaron este jueves para colaborar.
Sumado a esto, las últimas advertencias de bandera roja para las montañas de San Gabriel occidental, Santa Susana y el corredor de la I-5 expiraron, gracias a un cambio en las condiciones climáticas.
Los vientos disminuyeron y cambiaron de dirección, lo que permitió la llegada de aire fresco y húmedo que reemplace el aire seco previamente dominante en la zona. Este cambio es clave para las operaciones de contención del incendio durante el fin de semana, a pesar de que no se espera lluvia en el pronóstico del clima.
Un cambio en las condiciones climáticas trae algo de alivio para los bomberos. Foto:EFE
Las condiciones climáticas podrían volver a empeorar los incendios de Los Ángeles
Sin embargo, tal como detallo CNN, este cabio en las condiciones climáticas no trae solo buenas noticias. Las temperaturas nocturnas se prevén más bajas de lo normal, cayendo a mínimos de 4°C en algunas partes de Los Ángeles. Esto representa un problema adicional para los residentes que aún están sin electricidad, con más de 20.000 clientes afectados.
En las áreas de Ventura, San Luis Obispo y el Valle de San Fernando, se emitieron alertas de congelación, ya que las temperaturas podrían acercarse a dicho punto el viernes por la mañana.
A pesar del alivio temporal, el pronóstico indica la posibilidad de otro evento de vientos de Santa Ana para principios de la próxima semana, lo que podría complicar nuevamente los esfuerzos de contención de las llamas.
Las autoridades permanecen en alerta, monitoreando de cerca la evolución de la situación para responder de manera efectiva a cualquier cambio en las condiciones del incendio.
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