J. H. fue detenido el 8 de abril por las autoridades de Arizona y posteriormente enviado al Centro Correccional Florence, donde permaneció hasta el 17 de abril.
En un primer momento, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por su sigla en inglés) explicó que la captura del hombre "fue el resultado directo de sus propias acciones y declaraciones", dado que habría declarado que ingresó ilegalmente al país y que era ciudadano mexicano.
La polémica por el ciudadano detenido
En diálogo con el medio Popular Information, H. sostuvo que la versión de las autoridades no es correcta. Según relató, estaba viajando a casa de la familia de su novia en Tucson desde su residencia en Albuquerque, Nuevo México. En el trayecto, fue trasladado en ambulancia a un hospital zonal tras sufrir una convulsión. Aunque tenía una identificación estatal, no la llevaba consigo durante la emergencia médica.
Tras ser dado de alta, el joven no sabía cómo regresar a su alojamiento y fue entonces cuando se acercó al agente de la Patrulla Fronteriza. "Vi un coche y le pedí ayuda. Le dije que me alojaba en Tucson", contó.
De inmediato, el agente comenzó a hacerle preguntas sobre su estatus migratorio y, cuando respondió que era de Nuevo México, el oficial lo habría acusado de mentir. "
¿Por qué quedó detenido y cómo logró recuperar su libertad?
H. negó todas las acusaciones de las autoridades, en diálogo con el medio mencionado. Sin embargo, fue detenido después de firmar la transcripción entregada por el DHS.
Además, aseguró que trató de comunicar a los oficiales del centro de detención que era ciudadano estadounidense, pero lo desestimaron. "Me decían: 'Dígaselo a su abogado'", recordó.
El hombre permaneció detenido más de una semana hasta que, después de aplazarse una audiencia, su familia presentó al tribunal su acta de nacimiento.