Sin embargo, la designación de Rajoy no fue suficiente para despejar la preocupación de los inversores acerca de la capacidad de España de implementar reformas y superar un acuciante déficit.
El bono referencial del país a 10 años vio caer levemente su rendimiento, en línea con la mayoría de los títulos soberanos de la zona euro este lunes, mientras que el índice bursátil IBEX se veía arrastrado por una apertura en baja en las principales bolsas europeas.
Rajoy, que tendrá un Gobierno de minoría que representa el mandato más débil de la historia moderna de España, está trabajando para formar un nuevo Gabinete, que debe forjar el respaldo interpartidario suficiente para que se aprueben las reformas necesarias en un Parlamento hostil.
El equipo, que será anunciado el jueves, probablemente esté conformado por nuevas caras, aunque la mayoría provenientes del PP. Por el momento, no se han filtrado los nombres de los posibles integrantes del nuevo Gabinete.
Rajoy, de 61 años, gobernó con mayoría absoluta en su primer mandato, y con frecuencia se mostró despectivo hacia la oposición, por lo que ahora deberá convencer a los partidos opositores de que su voluntad de trabajar con ellos es genuina.
España padeció una severa recesión durante el primer Gobierno de Rajoy, cuando los bancos del país necesitaron 41.000 millones de euros (unos 45.000 millones de dólares) de rescate europeo. No obstante, la economía española está en proceso de recuperación.
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