OLP no negociará con Israel si EE. UU. no anula decisión de Jerusalén
La Organización para la Liberación de Palestina condicionó la posibilidad de un diálogo de paz.
El pronunciamiento se da después de que las Autoridades Nacionales palestinas le respondieran a Trump que 'Jerusalén no está en venta'. Foto: EFE / Abir Sultán
La Organización para la Liberación de Palestina (OLP) advirtió este martes que no retomará las negociaciones de paz con Israel hasta que EE.UU. anule el reconocimiento de Jerusalén Este como capital israelí.
"El liderazgo palestino no aceptará ninguna oferta para las negociaciones a menos que la decisión estadounidense sobre Jerusalén sea anulada", declaró el secretario general de la OLP, Saeb Erekat, a la emisora de radio Voz de Palestina.
Desde la declaración el pasado 6 de diciembre del presidente de EE.UU., Donald Trump, los palestinos han suspendido el o con los estadounidenses y los consideran desacreditados como mediadores de un futuro proceso de paz.
El presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmud Abás, canceló la reunión prevista en diciembre con el vicepresidente estadounidense, Mike Pence, que finalmente pospuso su visita oficial a Israel al próximo 22 de enero, según anunció este lunes la Casa Blanca.
Días antes, el presidente de EE. UU., Donald Trump amenazó con recortar la ayuda financiera. Sin embargo, el Gobierno estadounidense negó haber suspendido sus aportes a la Agencia de la ONU para Refugiados en Palestina. Foto:EFE / Alaa Badarneh
Tras la suspensión de los os, Trump condicionó la financiación a los palestinos a su vuelta a la mesa de negociaciones y amenazó con suspender los fondos de la UNRWA, la agencia de Naciones Unidas para los refugiados palestinos.
El mandatario estadounidense sugirió que el asunto de Jerusalén, uno de los históricos escollos en las negociaciones, quedaba fuera de la mesa de negociaciones lo que facilitaría su reanudación.
Sin embargo, los palestinos se oponen a esta estrategia y reivindican el sector este de Jerusalén, ocupado por Israel desde 1967 y anexionado en 1980 en contra la ley internacional, como capital de su futuro Estado.
Erekat manifestó que la actual istración estadounidense busca imponer dictados al liderazgo palestino al adoptar la posición israelí para liquidar la causa palestina "desmantelando la UNRWA, recortando ayudas, matando de hambre a los refugiados y cerrando colegios".
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