¿Es usted un amante de los mensajes de texto?, o por el contrario, ¿es más de los que prefiere enviar audios? Sea cual sea la respuesta, lo cierto es que la comunicación actual, en la mayoría de situaciones, no se concibe sin un dispositivo electrónico de por medio.
La tecnología es sinónimo de conectividad -a través de ella es más fácil comunicarse con otros, en tanto ofrece una amplia variedad de medios para hacerlo-, pero no necesariamente está asociada al fortalecimiento de las conexiones sociales.
Tener un sinfín de posibilidades comunicativas sólo hace más indispensable tener que elegir, de manera sabia, cómo conectarse con los demás. ¿Mensajes o audios? Es uno de los grandes dilemas que hoy en día surge entre las personas que utilizan aplicaciones de mensajería.
Sin embargo, este es un interrogante que no sólo inquieta a los s; por suerte, también genera dudas entre algunos investigadores de la Revista de Psicología Experimental -hace parte de la Asociación Estadounidense de Psicología y publica artículos que describen el trabajo empírico en temas de interés psicológico-, quienes decidieron realizar un curioso experimento.
WhatsApp permite modificar la velocidad con la que se reproducen los audios. Foto:Instagram: @whatsapp
Los investigadores -Kumar y Epley- pidieron a los participantes del ensayo de campo establecer conexión con un viejo amigo vía correo electrónico o teléfono; al tiempo que también les solicitaron hablar con un desconocido “a través de medios basados en video, voz o texto”.
¿El resultado? Todo parece indicar que las interacciones por voz -como chat de video y audios- resultan en un mayor bienestar para los s, pues no sólo contribuyen a generar vínculos más fuertes, sino que no generan incomodidad. Como en todo, esto posee sus pros y contras.
El medio español ‘The Conversation’ -es la principal plataforma en Internet para la difusión de artículos divulgativos firmados por académicos y científicos-, por ejemplo, ha indicado que elegir el audio frente al texto inclina la balanza hacia el emisor (que aligera su tarea) mientras que complica la del receptor.
WhatsApp es una de las aplicaciones que más actualizaciones hace. Foto:iStock
En el caso de las interacciones basadas en texto, el estudio difundido por la Asociación Estadounidense de Psicología reveló que, en comparación a la comunicación por voz, el texto generó resultados subóptimos en los que las expectativas respecto a la comodidad y conectividad de los s no se cumplieron a cabalidad.
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