El relato de una víctima de hombre que engañaba a personas LGBTIQ+ por Grindr para drogarlos y robarlos en Bogotá

El viernes, 30 de mayo de 2020, Juan Quintero salió hacia un hostal en el barrio Palermo, de Bogotá, donde se conocería con un hombre con quien había entablado conversaciones en una aplicación de citas. Tras llegar al lugar acordado y empezar a hablar, una bebida alcohólica se convirtió en un 'trago amargo' que marcó el inicio de una búsqueda de casi cinco años por justicia.

El hombre fue doblegado con sustancias tóxicas y, según le contó a EL TIEMPO, la persona con quien había arreglado para verse y otra implicada más en el hecho le robaron sus pertenencias. Hoy sigue pidiendo justicia tras conocer que su agresor fue capturado y asegurado en un centro carcelario luego de haber hecho lo mismo en varias ocasiones.

(Relacionado: En audiencia, hombre procesado por ataques a población LGBTIQ+ en Bogotá amenazó a fiscal con cuestionables gestos)

Hace cinco años y como consta en la denuncia interpuesta por parte de la víctima ante las autoridades, Juan se dispuso a conocer a un hombre con quien llevaba un tiempo hablando por medio de una aplicación de citas. El hombre, identificado como Andrés Rivera Méndez, ya le había propuesto en otras ocasiones que se vieran, lo cual no se pudo concretar hasta la noche en la que sucedieron los hechos.

Finalmente, el implicado lo citó en el hostal 'Rituals', ubicado en el barrio Palermo de Bogotá y que, según Rivera, era un “sitio de una amiga”. Al llegar, Juan se encontró con su cita y con la acompañante con el fin de “tomar algo y conocerse”. Las dos personas, una mujer trans y el hombre, con quien se había cuadrado la cita, estaban hablando y fumando marihuana.

Juan, con cierta desconfianza porque eran dos, accedió a hablar con ellos y a tomar algunas bebidas alcohólicas. “En un momento se volvió algo muy raro porque el hombre me dio un vaso de ron directamente a la boca, como embutiéndomelo”, mencionó la víctima, quien percibió una textura como de arena dentro del líquido. Antes de eso, el hombre le había dicho que su celular “era muy lindo”, lo cual no levantó muchas sospechas en la víctima.

(Además: Apareció supuesto testigo del asesinato de 'influencer' Valeria Márquez con nueva versión: 'No fue el repartidor')

Según el afectado, “no pasaron ni tres segundos” antes de que empezara a perder el conocimiento, motivado, seguramente, por la sustancia que había percibido en el fondo del vaso que le habían forzado a tomar.

Luego de eso, todo se nubló. Una de las escenas que recuerda en medio del estado de inconsciencia en el que se sumió luego de ingerir este trago es de él vomitando y siendo sostenido por los dos agresores, quienes le estarían tapando la boca con una bufanda para no hacer un desastre en el baño. Después, una laguna mental inundó su mente y lo hizo despertar tras el paso de las horas, mientras iba en un taxi a su casa junto a los agresores que lo dejaron tirado frente al hospital Palermo, sobre las 2:30 a. m.

Desde allí, caminó hasta su casa buscando entender qué le había pasado. Ya en su hogar, se dio cuenta de que no contaba con su celular y, al revisar el correo en su computador, vio las notificaciones de transacciones que superaban los 7 millones de pesos. Un día después, denunció ante las autoridades lo que le pasó, pero aseguró a este diario que en su caso no ha habido celeridad para sindicar a los culpables.

A pesar de pedir la ayuda de las autoridades, la frustración y la impotencia hicieron que Juan empezara a investigar por su cuenta los hechos de los que había sido víctima. Esta búsqueda dio frutos, pero, mencionó, no se han tomado en cuenta para las investigaciones y le preocupa que su caso quede impune.

(Lea también: Video | Violento robo en un conjunto residencial en Bogotá terminó en balacera en plena vía pública)

Según el hombre, logró arse con la mujer que estaba acompañando a quien lo engañó para asistir al hostal esa noche, intentando que entregara información a las autoridades, pues siguió indagando en la aplicación para citas y la encontró con otros nombres. "Le conté que había otra víctima de ella y Andrés. Que los estaba buscando para vengarse”, contó luego de corroborar que había otro hombre buscando a sus mismos agresores, pero que este buscaba accionar de otras formas en contra de los responsables.

Desde el momento en que se dio a conocer su denuncia, las autoridades comenzaron a investigar. Sin embargo, Quintero aseguró que fue poco el avance que se le dio a un caso que, en los próximos días, cumple cinco años. “El manejo de mi caso ha sido bastante negligente en la Fiscalía”, añadió. Según él, tuvo que ir personalmente a presionar establecimientos comerciales e incluso al banco en el que tenía sus cuentas para acceder a imágenes en donde se encontrara el rostro del principal agresor.

Con este material, confirmó que era César Andrés Rivera Méndez y que, según la Fiscalía, ya había estado preso anteriormente por casos similares. Ese nombre quedó resonando en su mente hasta el pasado lunes, 26 de mayo, cuando una noticia publicada en medios de comunicación lo volvió a mencionar.

Méndez fue imputado por hurto calificado y agravado y transferencia no consentida de activos por "suministrar productos veterinarios a integrantes de la población LGBTIQ+ para doblegarlos y quitarles sus pertenencias en Bogotá" con, al menos, cinco víctimas, según el comunicado de prensa emitido por la Fiscalía en ese caso. Sin embargo, entre ellas no estaba Juan, quien busca ser vinculado como víctima en el caso y que se le dé respuesta sobre cómo va su proceso en el sistema judicial.

Méndez fue recluido en un centro carcelario por una medida de aseguramiento que le impusieron luego de que la agencia fiscal demostrara que es un peligro para la sociedad. Hoy, Juan pide que se haga justicia también en su caso, del que no ha sabido nada, por lo menos, en un año.

REDACCIÓN ÚLTIMAS NOTICIAS.