Esta es la zona de Bogotá que está siendo ‘azotada’ por los ladrones de carros: comunidad asegura estar desesperada

Parece que la lucha de las autoridades por contener los delitos en la capital empieza a entregar sus primeros resultados. Este es el caso específico del hurto a automotores que entre enero y mayo de este año mostró una reducción del 5,8 por ciento frente al mismo periodo de 2023.

(También puede leer: Inició el plan de la Alcaldía de Bogotá para reducir el hacinamiento en las estaciones de policía: se trasladarán 570 personas a cárceles).

Pese a que los resultados han sido positivos para esta modalidad delictiva, lo cierto, es que hay algunas zonas de Bogotá en las que los vecinos siguen reportando constantes robos de carros y autopartes.

Según una denuncia realizada por la concejal del partido Centro Democrático, Diana Diago, los residentes del barrio Río Negro, en Barrios Unidos, están siendo “azotados” por los ladrones de carros quienes están dinamizando el aumento delictivo en el sector.

.(Le puede interesar: 32 líderes y lideresas sociales de Bogotá han denunciado amenazas en lo que va de este año: ¿quiénes estarían detrás de las intimidaciones?)

De acuerdo con Luz Marina Osorio*, una mujer de 56 años quien fue la víctima del hurto, tres hombres le robaron su carro justo en frente de su casa a las 10:30 de la noche de la semana pasada.

“Los delincuentes ingresaron al vehículo con una llave maestra y lo empujaron para robarlo. Este hecho quedó registrado en las cámaras de vigilancia del sector. Luz Marina afirmó que solicitó la ayuda de la Policía y denunció ante la autoridad, sin embargo, no tuvo una respuesta ante su acción”, declaró la concejal en su denuncia.

Pero para poder analizar el panorama de este delito en la ciudad y, en particular, en la zona de Barrios Unidos hay que revisar los datos de la Secretaría de Seguridad. Según las estadísticas de esta entidad, en los primeros cinco meses de este año se han registrado 1.663 casos de hurto a automotores en toda la ciudad.

Para la localidad de Barrios Unidos la cifra de estos robos asciende a los 49 casos y representa un incremento del 32,4 por ciento frente al mismo periodo de 2023, cuando los casos registrados fueron 37.

(Para complementar: ¿Bogotá está preparada para un modelo de cárceles abiertas?).

Aunque a nivel general hay una reducción de este flagelo, lo cierto es que en nueve de las 20 localidades de la ciudad hay un aumento en el robo de carros durante los primeros cinco meses del año.

En esa vía, Chapinero ocupa el primer lugar en este delito; allí el incremento ha sido de 71,4 por ciento con un registro de 24 casos. Le siguen: Barrios Unidos, que reporta 49 de estos robos y un repunte de 32,4 por ciento; luego, Usme, donde el delito creció 29,4 por ciento; Puente Aranda, con un registro de 156 casos y un incremento comparado de 27,9 por ciento.

También aparecen dentro de este listado, Los Mártires que creció 24,1 por ciento; Teusaquillo, donde el hurto de carros creció 17 por ciento; Santa Fe, con 16, 7 por ciento. También Usaquén y Tunjuelito con incrementos de 5,1 y 4,5 por ciento respectivamente.

Por el lado de las modalidades, los análisis de la Policía Metropolitana de Bogotá han logrado identificar que el 80 por ciento de los hurtos de automotores se dan bajo la modalidad de halado; es decir, cuando las víctimas dejan sus carros mal estacionados o en lugares prohibidos y el delincuente aprovecha para hurtarlo.

Carlos González, víctima de esta modalidad de hurto, contó cómo cayó en manos de los delincuentes: “Yo llegué a la localidad de Engativá y dejé el carro estacionado en la calle mientras ingresaba a un lugar, cuando salí ya no encontré el carro. Llamé al 123 y me enviaron al cuadrante, y ellos lo reportaron por el radio. Al otro día mi carro apareció”. Sin embargo, la historia de González no es la de la mayoría de los bogotanos.

“Que el porcentaje de hurtos por halado en la ciudad sea tan alto implica un reto para las autoridades, pero también, denota que hay un componente de descuido de los propietarios que dejan en la calle los carros sin ningún tipo de seguridad y, aparte, infringiendo las normas que señalan lugares específicos para dejar los carros”, expresó un investigador de Setra de la Policía de Tránsito y Transporte.

Ahora hay una modalidad que está alertando a las autoridades y es el uso de la extorsión luego del robo de los vehículos. “Se roban el carro y luego an a las víctimas para pedirles dinero a cambio. Lo que no saben estás personas es que les pueden robar el dinero y también el carro, o entregarles el vehículo por partes”, explicó el investigador.

Tras la denuncia de la concejal Diago, este medio consultó las bases estadísticas de la Secretaría de Seguridad y pudo identificar que los delincuentes estarían usando una combinación de elementos para poder propinar sus robos.

Por ejemplo, del total de hurtos de vehículos que se han realizado en Bogotá este año, 843 corresponden al uso de llaves maestras; otros 446, se ejecutaron usando armas de fuego; 322, fueron sin el uso de armas de ningún tipo; 23 casos en el que los criminales han usado escopolamina y, finalmente, 21 en el que las armas blancas han sido las protagonistas.

En este delito, según las investigaciones de las autoridades, las modalidades de robo son variadas. Rompevidrios que arrancan los espejos, ladrones de llantas que se movilizan en otros vehículos, delincuentes que aprovechan que los carros son parqueados en la vía pública y arrancan la computadora o cerebro de los automotores.

También se ha podido identificar la existencia de talleres de mecánica fantasmas donde se roban los repuestos en buen estado y los cambian por otros dañados y también las estafas con servicios mecánicos ofrecidos por internet en el que las víctimas son llevadas con engaños hasta un punto específico y luego son despojadas de sus carros que luego venden por partes en el mercado negro.

Según Carlos Pineda, presidente de la Asociación del Sector Automotriz y sus partes (Asopartes), “en algunos casos es común escuchar que cuando el propietario lleva a sitios no autorizados de las marcas o con alguna trayectoria en el mercado, mecánicos inescrupulosos cambian partes originales y valiosas por otras usadas o dañadas y lastimosamente el propietario del vehículo termina pagando más caro después”.

De acuerdo con esta misma entidad, las piezas de carros más hurtadas cuando están en sitios públicos son los espejos, plumillas y placas, mientras que en otras modalidades —como las descritas en este artículo— “la tendencia apunta a módulos electrónicos y autopartes pequeñas de altísimo costo”, explica Pineda.

“Los repuestos robados son partes muy específicas de un carro que luego las venden por menos de 200.000 pesos. Uno se da cuenta de que no están o se las cambiaron porque la suspensión falla, y se nota”, aseguró un trabajador de taller de mecánica que prefirió no ser identificado.

En esa vía, las personas consultadas también aseguraron que entre las autopartes que más se roban están todo tipo de bujes, bases de amortiguador y las unidades mecatrónicas de la caja de cambios. Los espejos y las llantas, aunque ya son un negocio menos rentable, todavía clasifican entre las partes más hurtadas.

Finalmente, las estadísticas oficiales también han permitido identificar otros factores que son determinantes a la hora de desplegar operativos contra las mafias de los repuestos robados. Por ejemplo, se pudo establecer que los modelos de vehículos más apetecidos por los criminales son el Chevrolet Spark, el Kia Picanto y el Hyundai I10 Gl. En cuanto a los colores, el patrón de los robos se concentra en los blancos, grises, rojos y negros.

JONATHAN TORO ROMERO

Redacción Bogotá