Esto dice el fallo que le daría vía libre a las corridas de toros en Bogotá

Luego de tres años desde que un proyecto de acuerdo del Concejo de Bogotá reguló las corridas de toros en la ciudad y de varios pleitos legales y licitaciones desiertas para la reapertura de la temporada taurina en la capital del país; una sentencia del Juzgado cuarto istrativo del Circuito Judicial de Bogotá, proferida el primero de diciembre de este año, parece haberle dado vía libre nuevamente a la fiesta taurina de la forma en la que tradicionalmente se celebraba.

Según el documento que conoció EL TIEMPO el Concejo de Bogotá habría aprobado bajo la ilegalidad el acuerdo 767 de 2020 en el que prohíben el uso de picos, estacas u otros elementos que puedan herir de forma profunda al animal durante el espectáculo.

Bajo esa misma línea, el juzgado señaló que “el artículo 6 del Acuerdo demandado excedió las funciones que podía ejercer el Concejo Distrital en atención al principio del rigor subsidiario, que se recuerda, está limitado en todo caso al marco legal que dicte el órgano competente que es el Congreso de la República”.

Y es que precisamente es ese artículo del Acuerdo el que señala que “sólo podrán realizarse actividades taurinas en las fechas que fije la Secretaría Distrital de Cultura, Recreación y Deporte, que en todo caso no podrán ser más de tres domingos”.

Sin embargo, el artículo más problemático del Acuerdo, según el juzgado, es el tercero en el que se estipula que no se podrá usar ningún instrumento que lesione al animal durante la corrida. Según el fallo, tanto el artículo sexto, que restringe las fechas para la celebración de los eventos taurinos, como el tercero, que prohíbe causar dolor al animal; “modifican la esencia de la tradición”.

“Si bien el Concejo argumenta que busca la desincentivación de la práctica taurina en la ciudad de Bogotá, lo cierto es que las dos disposiciones mencionadas, modificaron la estructura y forma en que se desarrolla el espectáculo taurino, pues prohíben la muerte del toro y el uso de elementos que puedan producir cualquier forma de maltrato al toro. Con ello, el Concejo sobrepasó los límites de sus competencias, deformando el espectáculo taurino en los términos en que fue reconocido y regulado por la Ley 916 de 2004, y en la manera como esta práctica cultural ha sido protegida por la Corte Constitucional”, señaló el fallo.

En consecuencia con lo expuesto anteriormente por el fallo del juzgado, se declararon nulos los artículos 2, 3 y 6 del acuerdo que regula las corridas de toros en Bogotá.

Frente a esta situación el Distrito manifiesta que para reactivar las corridas de toros en Bogotá la nueva istración deberá abrir una nueva licitación para ceder la temporada taurina de 2024. No obstante, señalan que, bajo los criterios que había adoptado el Concejo de Bogotá, se abrieron las licitaciones correspondientes por parte del IDRD pero que resultaron desiertas debido a las modificaciones que la ciudad adoptó para la realización del show.

Según lo estipulado en el nuevo fallo, el próximo proceso de selección y adjudicación de la temporada taurina deberá respetar las reglas tradicionales y permitir el regreso del uso de los picos, estacas y demás objetos clásicos de la fiesta taurina.

REDACCIÓN BOGOTÁ