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Tres perros que eran paseados mueren en ataque de abejas en Bogotá
El árbol donde las abejas tenían su panal se cayó por las fuertes lluvias.
Las constantes lluvias que azotan a Bogotá han dejado muchos damnificados. El último reporte entregado por la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) sobre las afectaciones que se han presentado durante casi dos meses de lluvias, dan cuenta de 33.000 familias perjudicadas.
Pero el fenómeno de la niña y el comienzo de la temporada de huracanes no solo han lastimado a los humanos, sino a varias mascotas. Ese fue el caso de un grupo de perros que eran paseados por el norte de la capital y que tuvieron que padecer de una tormentosa situación a causa de un árbol caído.
Se demoraron una hora en llegar los bomberos, cuando la estación está ubicada en la 65 con novena
Anderson Rodríguez y Johanna Perez, paseadores de perros desde hace 18 años, se encontraban en el sector de la calle 95 con carrera séptima el pasado lunes. En el sitio habría en total unos 30 caninos al cuidado de varios paseadores.
En un momento dado, los trabajadores oyeron un crujido proveniente de un árbol que se había caído por las fuertes lluvias, presuntamente, debido a la blandura del terreno en el que este estaba asentado. Lo que los esposos no se esperaron es que dentro de este hubiera un panal de abejas, el cual se dispuso a atacarlos a ellos y a los canes con los que transitaban.
Las abejas fueron declaradas como los seres vivos más importantes del planeta , según el Eearthwatch Institute. Foto:Istock
“Nosotros bajamos con unos perros, algunos que tenían lazos se enredaron en los árboles del desespero por las picaduras de las abejas”, dijo Rodríguez para EL TIEMPO.
El esfuerzo no fue suficiente
Tras algunos momentos de desespero, a las 9:05 a.m. llamaron a la línea de emergencias, quienes, según el relato de la pareja, solo aparecieron en el punto a las 10 a.m. “Se demoraron una hora en llegar los bomberos, cuando la estación está ubicada en la 65 con novena”. Distancia que se podría recorrer en menos de 10 minutos.
Aunque varias personas más colaboraron bajando a los perros desde la zona boscosa hasta un terreno seguro, muchos de estos canes recibieron múltiples picadas de abeja, tres de ellos están internados en urgencias veterinarias y tres fallecieron instantes después.
“Nos tocó correr con los perros, quitarles las abejas con las manos, a mí me picaron la cara, la cabeza, las piernas. Debido al invierno, el árbol se cayó y las abejas salieron a defender su hogar”, afirmó el hombre.
A pesar de las más de 50 picadas de abeja con las que terminaron Anderson y su esposa, afirman que este hecho le dejó una lección de vida, pues los mismos perritos se estaban ayudando entre ellos para no ser heridos: “Ellos trataban de morder las correas para liberar a los otros perros, a pesar de que los picaban no les importaba”.