Las pruebas por las que piden 50 años de cárcel al asesino de la DJ Trespalacios

La Fiscalía General de la Nación radicó ayer el escrito de acusación en contra de John Nelson Poulos como presunto autor del feminicidio de la joven DJ Valentina Trespalacios.

Hay que recordar que los hechos ocurrieron el domingo 22 de enero en el edificio Kapodocia, ubicado en el norte de Bogotá, para luego aparecer muerta dentro de una maleta de viaje que fue abandonada en el barrio Los Cámbulos.

(Lea: Fecha de juicio de acusación contra John Poulos por caso Valentina Trespalacios)

La acusación que el ente del control le hará al norteamericano será por la conducta de feminicidio agravado en concurso con el ocultamiento de elemento material probatorio.

Esto, explica el ente investigador, le daría una pena de 600 meses (50 años) de prisión gracias a que la Fiscalía cuenta con pruebas suficientes sobre las conductas penales en que habría incurrido el americano.

En las audiencias que precedieron esta decisión, a través de fotogramas, videos, entrevistas y documentos, el organismos investigador mostró una especie de línea de tiempo sobre el paso a paso del plan de John Poulus para cometer el crimen contra la joven Valentina.

Un dato clave fueron los documentos de alquiler del apartamento y del vehículo involucrados en este crimen, pues dejan claro que, a diferencia de lo que pensaba la familia de la DJ, el estadounidense no contemplaba permanecer más de cuatro días en el país.

En cuanto a pruebas son relevantes una maleta color azul sin una rueda, una cinta negra y una manta que aparece en diferentes escenarios en este crimen, elementos que además han sido mencionados por varios testigos entrevistados para el caso en mención y que habrían sido utilizados por el presunto homicida para embalar el cuerpo de la joven, amarrar la maleta y ocultar la cabeza para luego botarla en un contenedor de basura.

De igual importancia fue el hallazgo del teléfono de Valentina Trespalacios por parte Francisco Javier Sáenz Díaz, trabajador del aeropuerto El Dorado, quien decidió entregarlo a las autoridades cuando se dio cuenta que pertenecía a la mujer de la que estaban hablando todos los medios de comunicación.

También fue clave el testimonio del conductor de Uber, Michael Bonilla, quien no solo dio cuenta de la existencia de una maleta azul de propiedad de Poulus, sin una rueda, sino de su intención de comprar drogas en el país. Otros testimonios como el del portero del edificio, la empleada del servicio encargada de asear el apartamento en el norte de Bogotá donde habría muerto Trespalacios y el habitante de la calle que encontró el cuerpo fueron trascendentales.

Todos los testigos confirmaron momentos claves de la intención del norteamericano de ocultar pruebas y en sus relatos se hallaron coincidencias. Según conoció este diario, se comprobó a través de fotogramas, videos y decenas de horas de grabación expuestas ante el juez del caso que había una intención explícita de ocultar pruebas. Los elementos probatorios existentes fueron explicados de una manera tan detallada que la defensa de John Poulus no pudo desvirtuarlos. 

CAROL MALAVER - SUBEDITORA BOGOTÁ

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