Para los habitantes del barrio El Cortijo y Ciudadela Colsubsidio, actualmente no hay forma de llegar a la calle 80 a través de la carrera 119. Antes no era así. Hasta hace unos meses esta vía tenía una función fundamental: descongestionar una de las principales salidas de la ciudad.
EL TIEMPO visitó la zona en respuesta a la denuncia que realizó nuestro lector Jaime Torres a través de Facebook y evidenció la situación. Esta vía arterial conecta la calle 80 con una paralela y permite el flujo de vehículos desde el barrio hacia el puente de Guadua.
La calle, que supera el medio kilómetro de extensión (522 metros), tiene cráteres de al menos 15 metros, además, en algunos sectores está llena de escombros de construcción, tablas de madera, basura, muebles viejos y hasta una batería sanitaria.
En hora pico, la vía es esencial porque es una alternativa para los ciudadanos que trabajan o viven en las afueras de la capital. El hecho de que ya no exista la posibilidad de circular por esta calle genera toda una cadena de acontecimientos que afectan la movilidad en el occidente de Bogotá.
Por un lado, las personas que habitan los barrios aledaños y deben salir en horas pico tienen como única salida la carrera 116. “Esta situación se complica si tenemos en cuenta que la salida de la calle 80, por lo general, siempre está congestionada en la mañana”, manifestó Torres, quien vive en el sector desde hace 20 años y asegura que esta calle jamás ha sido intervenida.
Hasta hace muy poco tiempo, esta calle también era la vía de para los buses que salían del ya inexistente paradero de El Cortijo. De acuerdo con Torres, el deterioro de la vía se debe a esto y a que en más de 20 años ninguna entidad se acercó a verificar su estado. “Desde que se fundó el barrio, los buses salían por la 119 y rodeaban El Cortijo. Obviamente, la calle se deterioró por esta razón”, señaló.
Según el denunciante, con la llegada del SITP hace seis años la situación empeoró. “Estos buses ya no iban hasta el paradero, sino que se parqueaban aquí. A eso súmele todos los carros que pasaban por aquí para salir de la ciudad, y que no hubiese mantenimiento”, señaló el residente.
Actualmente, solo la ruta T56 del SITP pasa por esta zona. Se trata de un recorrido circular que conecta a Ciudadela Colsubsidio, El Cortijo y Bachué, y reemplazó las seis rutas que antes salían desde este punto y que ahora tienen como paradero este último barrio. “A veces pasan algunas motos que logran treparse por el andén”, dice Torres.
Desde que se fundó el barrio, los buses salían por la 119 y rodeaban El Cortijo. Obviamente, la calle se deterioró por esta razón
Durante el recorrido que realizó EL TIEMPO, se pudo evidenciar las maromas que debe hacer el conductor de esta ruta para sortear uno de los huecos ubicados en el extremo norte de la vía. “Como el SITP ya no pasa por acá, dudo que la vengan a arreglar”, señala Martha López, otra residente del sector.
Sin embargo, hay quienes sostienen que la calle no debe ser reparada. Mientras visitábamos la zona para evidenciar la situación, un residente del sector manifestó: “Es mejor que no arreglen esa vía. Antes, cuando los carros podían pasar por acá, el trancón en el barrio era terrible. Ni hablar de buses y rutas empresariales que preferían utilizar esta calle y taponaban el cruce”, refiriéndose a la intersección de la calle 83A con 116A.
Ante la queja de los vecinos, consultamos con la Unidad de Mantenimiento Vial. La entidad indicó que esta calle no hace parte de su jurisdicción por ser una vía arterial, por ende, su reparación es responsabilidad del Instituto de Desarrollo Urbano (IDU).
Al cierre de esta edición, no se ha recibido una respuesta oficial por parte del IDU. De igual forma, desde la alcaldía local de Engativá manifestaron que están indagando si la vía será reparada; sin embargo, hasta la fecha, no se ha emitido una comunicación oficial sobre el caso.
CAMILO ANDRÉS CASTILLO
REDACCIÓN BOGOTÁ