Manuel Sarmiento: Es tiempo de la dignidad | Opinión

La actual campaña en Bogotá ha girado casi exclusivamente entre las propuestas de movilidad y seguridad. La mayoría promete más de los mismo, disfrazando el falso cambio o independencia y planteando soluciones mágicas irrealizables. Salvo Jorge Enrique Robledo, los aspirantes están desconociendo la realidad de una ciudad en la que millones de familias están sumidas en la pobreza y el hambre.

Es impresentable que en Bogotá el 32 % de sus habitantes, 2,5 millones de personas, tengan que vivir con menos de tres comidas al día y que otra parte, 665.000 ciudadanos, tengan que vivir con $8.000 al día. De acuerdo con la misma Secretaría de Planeación, son más de 4,5 millones de bogotanos que se encuentran en la indigencia, la pobreza y la vulnerabilidad.

Durante 8 años como concejal he demostrado que Petro, Peñalosa y Claudia López han priorizado los intereses de grandes poderes económicos, sobre la protección de las poblaciones vulnerables, la clase media y el empresariado. Profundizaron la destrucción del aparato productivo distrital impuesto por los tratados de libre comercio que viene quebrando empresas y privatizando los principales servicios de la ciudad.

Por eso, lideramos la construcción de un programa con Jorge Enrique Robledo capaz de empezar a transformar esta realidad y generar las condiciones para que Bogotá produzca riqueza y empleo digno. Una política económica que se centre en la industria bogotana, complementada con un paquete de propuestas que mejore las condiciones de vida, la seguridad y la capacidad de consumo de las familias bogotanas.

Pasaje Cero, parte de entender que cuando el a derechos fundamentales es bloqueado por el costo del transporte público, la calidad de vida de la gente se frustra. Con Pasaje Cero nace un derecho que permite acceder a otros derechos como el trabajo, la salud, la educación, la cultura y la recreación. Demostramos que con el 0,5% de los recursos de la nación y sin tocar los recibos de la luz de los hogares, podemos garantizar una reducción progresiva del pasaje para llegar a la gratuidad total.

Seguridad alimentaria, mediante la creación de 120 nuevos comedores comunitarios, para que un total de 70.000 personas vulnerables puedan acceder a comida caliente y de calidad. Al final del cuatrenio, la ciudad quedará con 225 comedores funcionando de domingo a domingo. Y se complementa la ampliación en dos metros cúbicos del mínimo vital de agua para estratos 1 y 2, y la incorporación del estrato 3 a este programa con cuatro metros cúbicos.

Diseñamos un programa de empleo público dirigido a la juventud, las mujeres, los adultos mayores y las personas con discapacidad. Se crearán 100 mil nuevos empleos garantizando el pago de un salario mínimo, los vincularemos en la prestación de servicios sociales y de apoyo comunitario, para reconstruir los tejidos sociales de los barrios, mejorando las condiciones de seguridad en el espacio público.

Por último, arriendo social, un subsidio de entre $300.000 y $490.000 mensuales para 88 mil hogares de los estratos 1, 2 y 3, reduciendo el factor más importante en el gasto de las familias que se ven sometidas a condiciones indignantes de hacinamiento o a privarse de necesidades básicas para garantizarse un techo. Se trata de mover el mercado del arriendo en la ciudad, en el que los arrendatarios de los barrios de auto construcción tengan asegurada una renta que les permita mejorar sus viviendas y su economía familiar.

Una visión social que seguiré defendiendo desde el Concejo y que tiene un mensaje central: ¡Es el Tiempo de Bogotá, el Tiempo de la Dignidad!

MANUEL SARMIENTO 

CANDIDATO DEL PARTIDO DIGNIDAD Y COMPROMISO

ESPECIAL PARA EL TIEMPO