En la noche de este jueves surgió una preocupación adicional en medio de la emergencia que se vive en Barranquilla a raíz de la explosión de dos tanques que almacenaban combustible, porque, al parecer, la empresa Bravo Petroleum no contaba con la póliza de riesgos correspondiente.
Sin embargo, la ministra de Minas y Energía, Irene Vélez, habló sobre el tema y aclaró lo que realmente ocurrió frente a este tema. Aunque la póliza no aparece registrada en el sistema de información Sicom, la empresa la hizo llegar vía correo electrónico el día de ayer.
"Esa póliza que recibimos, efectivamente, tiene una vigencia de un año a partir de septiembre de 2022. Según lo que recibimos, todo parece indicar que sí tenía la póliza, no obstante, en lo que nosotros inicialmente vimos en el sistema, no aparecía. Sí tenemos una diferencia, pero lo importante es que en este momento parece que sí existe la póliza y estamos en el proceso de análisis", explicó la ministra.
Los dos tanques que se incendiaron tenían gasolina corriente que sería enviada para abastecer la demanda de algunas zonas de frontera en el norte del país. El primero que explotó tenía 4.000 barriles y el que aún se encuentra en llamas, 50.000 barriles.
Sin embargo, la ministra dio un parte de tranquilidad en cuanto al suministro, ya que el 24 de diciembre Ecopetrol tiene prevista la entrada de un buque, que será priorizada por la Dimar, con el fin de asegurar el abastecimiento para lo que resta del mes.
Igualmente, aseguró que es clave que se investigue cuáles fueron las causas que originaron esta emergencia, si estaban todas las medidas de gestión y mitigación del riesgo y si cumplía con todos los requerimientos para ser un agente de almacenamiento de combustible. "Nosotros a nivel interno ya comenzamos (el análisis), pero, por supuesto, también se requiere investigación de otras entidades", dijo.
Esta emergencia ya completa más de 41 horas y desde la Alcaldía de Barranquilla se están monitoreando tres riesgos: posible explosión del tanque vecino que contiene 4.000 barriles de jet (combustible de avión), un derrame de combustible en el río Magdalena y un empeoramiento de la calidad del aire de la zona.
"Me da tranquilidad que se está implementando estrategias defensivas y de control de una manera muy exitosa, lo que ha permitido que esto no pase a mayores, no sin decir que, por supuesto tiene un impacto, pero el control que se ha logrado nos deja una tranquilidad. El esfuerzo ha valido la pena para que esto no tuviera consecuencias aún mayores", destacó la ministra.