A través de funciones de funciones de teatro, montajes de danzas y actividades lúdicas, un grupo de la Secretaría de Gestión del Riesgo de Emergencias y Desastres se las ingenió para hacer pedagogía sobre la prevención de posibles desastres en zonas de riesgo de la ciudad.
Resultado de ello nació el Sistema de Alertas Tempranas Inteligentes y Comunitarias, Satic, en la que a través de elementos como el arte le permite a la comunidad tener herramientas de acción ante situaciones de emergencias.
Cali y el Valle del Cauca cuentan con zonas con alto riesgo de inundaciones y desastres naturales que suelen dejar víctimas y damnificados.
La subsecretaria para el Manejo de Desastres, Mónica Jiménez Valencia, explica que el proyecto Satic busca “integrar capacidades digitales y comunitarias desde herramientas que nuestra población tiene para prevenir, reducir y responder ante cualquier situación de emergencia o desastre”.
“En estos momentos estamos manejando dos escenarios de riesgos para hacer el ejercicio territorial. Uno es el asociado a inundaciones de carácter pluvial o fluvial en todo el oriente de nuestra ciudad y otro es el escenario de deslizamientos o remociones en masa en toda la ladera y corregimientos”, indica la funcionaria.
El arte es uno de los elementos que ha encontrado el Satic para poder transmitir su mensaje a la población en riesgo de desastres.
“Nosotros creamos personajes asociados a la misionalidad del proyecto. Creamos por ejemplo, personajes como Riesgolito y Riesgolita que han servido mucho para transmitir los conceptos del riesgo a los niños, jóvenes y adultos. Además realizamos puestas en escena de teatro para destacar conceptos como amenaza, vulnerabilidad, riesgo y resiliencia”, explica la subsecretaria Jiménez.
El propósito de esta iniciativa es brindar un mensaje educativo, pedagógico que busca que las personas “entiendan que la gestión del riesgo que las herramientas y capacidades son bienes comunes para la comunidad y en la medida que los tengamos salvan vidas y reducen las pérdidas de patrimonio en cualquier caso relacionado con algún evento de emergencia”.
“Articulamos el trabajo de la prevención con el arte porque queremos acercarnos al ciudadano, queremos que esos conceptos que muchas veces son técnicos de la gestión del riesgo sean fáciles de entender y que precisamente la gente se asuma como primer respondiente de la gestión del riesgo”, añade la funcionaria.
Como resultado, el proyecto ha recorrido con éxito diferentes poblaciones de ladera y zona rural de la ciudad donde sus habitantes han podido tener una mayor comprensión sobre la importancia de protegerse ante posibles emergencias.
“El arte siempre es un mecanismo para poder sensibilizar y llegar a otros, convencer a otros, llevar nuestras ideas a ser entendidas por los demás”, finaliza Jiménez.
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