Durante visita de Misión ONU, sepelio de otro excombatiente asesinado

Mientras delegados de 15 países que llegaron con del Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU) recorrían un cultivo de tomate árbol sembrado por 232 excombatientes de las Farc dentro del Espacio Territorial del Capacitación y Reincorporación de Caldono, cerca de este municipio del norte del Cauca, familiares de uno de los desmovilizados asesinados lo estaban enterrando.

Se trata de Luis Carlos Yunda, quien hizo parte de la entrega de armas de la entonces guerrilla, tras los acuerdos de paz con el Gobierno Nacional durante la presidencia de Juan Manuel Santos. Yunda, de 42 años, fue atacado el martes pasado, cuando estaba con su hermano, en el sector La Vuelta de la Chica.

Este crimen, en el corregimiento El Jagual de Corinto (Cauca), fue el segundo en este departamento contra excombatientes de las Farc, en menos de dos días, pues el lunes fue asesinado Wéimar Galíndez, de 24 años. Este último había asistido a un bazar comunitario en la vereda Tamao, en El Tambo. Por este atentado también falleció un campesino de la zona, que fue identificado como Erick Danilo Narváez, de 23 años.

La familia lo enterró el sábado en Corinto y también a la madre del exguerrillero, en momentos en que la Misión de la ONU continuaba su visita al Espacio Territorial de Capacitación y Reincorporación (ETCR) de la vereda San Antonio de los Monos, en Caldono. La madre de Yunda falleció por causa de un infarto, tras conocer la noticia del asesinato de su hijo.

“Hemos hecho un llamado al Gobierno Nacional, que esto hay que pararlo. Colombia no puede seguir ni puede repetir el genocidio que ocurrió años antes con la Unión Patriótica”, sostuvo Catatumbo.

El congresista añadió que se necesita que el país consolide lo acordado en el acuerdo de paz.

“El Gobierno ha dicho que ha tomado nota y está haciendo los esfuerzos solo esperamos ver resultados”, manifestó, al tiempo que jóvenes del Centro Democrático, Cambio Radical y de la U, también escucharon la preocupación por los asesinatos a líderes en Cauca, uno de los más críticos con Nariño y Antioquia, según el Instituto de Estudios sobre Paz y Desarrollo (Indepaz). Este entidad dio cuenta de que hasta mediados de mayo pasado se contabilizaron 75 líderes asesinados en todo Colombia, mientras que el partido Farc señaló que van 137 crímenes contra excombatientes en el país, 30 de los cuales, en Cauca.

“En solo el municipio El Tambo (norte del Cauca) nos han matado a siete”, dijo Catatumbo.

“Aquí lo que queremos es que sea con la propia mirada del Consejo de Seguridad que vea el compromiso de los exguerrilleros y del partido Farc de seguir trabajando por la implementación del acuerdo y superando todas las dificultades”, dijo Pastor Álape, representante a la Cámara por el partido Farc.

Mientras tanto, Emilio Archila, alto consejero para la Estabilización del Gobierno, respondió sobre el exterminio de los excombatientes, como lo califica el partido Farc: “Estamos haciendo absolutamente todo lo que está al alcance del Gobierno. En la medida en que la Fiscalía avanza en sus investigaciones se han ido resolviendo un número importante de casos”.

Archila anotó que los delegados de la Misión de la ONU reconocieron el compromiso del Gobierno para el cumplimiento el acuerdo de paz con las Farc y se espera respuesta a la solicitud de que se amplíe un año más el acompañamiento por parte de este estamento en el país.

El alcalde de Caldono, Paulo Andrés Piso, agradeció la presencia de los de la ONU y también pidió que se mantenga este acompañamiento para garantizar el cumplimiento de los pactado en el acuerdo de paz.

“Necesitamos seguir teniendo el apoyo del Gobierno Nacional, del Consejo de Seguridad de la ONU, para que así este proceso pueda ser eficaz y eficiente, y podamos tener una paz estable y duradera”, concluyó el mandatario local.

CALI Y POPAYÁN