Jorge Enrique Oramas, quien creó y dirigía Biocanto, un lugar donde se cultivan granos que están un poco extintos y maíces de colores que ya no se consiguen, fue asesinado en la noche de este sábado.
Oramas se oponía a la minería en el sector de Los Farallones, en Cali.
Tenía 70 años y era muy apreciado por la comunidad. Oramas vivía solo en ese sector, perteneciente al corregimiento La Buitrera, desde hace ocho años.
El sociólogo y agricultor les entregaba a los campesinos semillas sanas, sembraba tubérculos y además era experto en la quinua.
Se desconocen las causas del asesinato de Oramas, así como los móviles y agresores.
El crimen de Oramas generó pesar en algunos concejales de Cali. La cabildante Alexandra Hernández, describió al líder asesinado como "un defensor del medio ambiente que se opuso a la minería ilegal en el parque natural los Farallones que cubre las montañas en las que nacen seis de los siete ríos que bañan a Santiago de Cali. Triste noticia que nos recuerda que estamos entregando recursos naturales a cambio de costos sociales, ambientales y de Derechos Humanos graves, puesto que los montos designados para protección del capital ecológico impiden la renovación del ecosistema generando la ruptura del tejido social, pareciendo palpable la ausencia de garantías y una galopante deuda medio ambiental".
Por su parte, el concejal ambientalista y animalista, Terry Hurtado, afirmó que es "una pérdida para el movimiento animalista de Cali" y recordó a Oramas como una personada dedicada "al cultivo de semillas nativas y un trabajador incansable de la biodiversidad del Parque Nacional los Farallones, donde ejercen presión grupos ilegales dedicados a la minería ilegal".
Hurtado señaló que "las autoridades deben actuar con celeridad para aclarar y dar con los responsables de este crimen y el gobierno propender por garantizar la vida de animalistas y ambientalistas de Cali”.
CALI