Un menor de edad extorsionaba a un adolescente para no hacer públicas conversaciones privadas que atentaban contra la dignidad y el buen nombre de este último.
El presunto extorsionista habría exigido pagos que sumaron unos $ 65 millones a la familia de la víctima y que fueron entregados, según la Fiscalía, en dinero, joyas, relojes, un computador portátil y teléfonos celulares.
La Fiscalía General de la Nación en un trabajo con el Gaula Militar abrió una investigación que da cuenta de llamadas telefónicas a la víctima. En la última, el presunto extorsionista, quien tiene 17 años, fijó una nueva entrega de dinero.
La Fiscalía informó que investigadores del Gaula Militar establecieron que el joven acordó esa entrega en un centro comercial en el norte del Valle del Cauca. El caso venía sucediendo en el municipio de Sevilla.
Después de pesquisas y de hacer un seguimiento por parte de servidores del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía con agentes del Gaula Militar, el menor fue aprehendido cuando tenía en su poder un sobre que contenía el dinero producto de las llamadas extorsivas.
Este menor fue llevado a las audiencias de imputación de cargos por extorsión, que el joven no los aceptó.
Un juez le impuso medida de internamiento preventivo en un Centro de Atención Especializado (CAE) de Sevilla.
Entre tanto, policías en el municipio de Jamundí capturaron a un adulto y aprehendieron a tres adolescentes, quienes tenían en su poder tres armas de fuego con las que presuntamente venían afectando la tranquilidad de los habitantes del barrio el Rodeo.
Los uniformados adscritos a la Unidad Nacional de Intervención Policial (Unipol) hicieron efectivo el procedimiento, luego de atender el llamado de la ciudadanía, a través de la línea única de emergencia, en la que informaban sobre múltiples disparos en una zona residencial.
De inmediato, los uniformados hicieron presencia en el lugar, "hallando en una vivienda a estas personas con un revólver, una pistola y un arma de fuego de fabricación artesanal con munición para las mismas".
El capturado y los aprehendidos fueron dejados a disposición de la Fiscalía General de la Nación por los presuntos delitos de fabricación y tráfico o tenencia de armas de fuego, rios, partes o municiones.
Entre 500 y hasta 800 menores que delinquen en un año en el Valle
En un año, según autoridades del Valle, más de 575 adolescentes fueron registrados en el sistema judicial como infractores de la ley. Algunos hacían carrera en organizaciones delictivas hasta llegar al deseo de ser jefes de las mismas.
Hace dos años hubo 782 menores aprehendidos en el departamento, según la Policía Valle, de los cuales, 460 correspondieron a Cali. En 2021 se contabilizaron 846 adolescentes del Valle, en el sistema judicial.
De acuerdo con la Policía Valle y la Metropolitana de Cali, se está observando una tendencia marcada de instrumentalizar a menores para cometer delitos en la ciudad, entre ellos, asesinatos, lesiones, portes de armas y tráfico de drogas, exponiéndolos, además, a que no solo se conviertan en victimarios, sino en víctimas de asesinatos.
Para el Grupo de Infancia y Adolescencia de la Metropolitana de Cali, adolescentes desde temprana edad, muchos de ellos, desde los 13 y los 14 años están cada vez más involucrados en hechos delictivos con influencia de grupos delincuenciales que se aprovechan de sus condiciones de pobreza. Señalaron que cuando un menor delinque es necesario analizar qué pasa en su entorno, en su hogar y en su colegio.
Casos como el de los menores aprehendidos en Jamundí con un adulto recuerdan uno en los municipios de Roldanillo y La Unión, en el norte del Valle, donde una familia lideraba una banda delincuencial. El papá cometía homicidios, la mamá almacenaba la droga y el hijo, de 17 años era empleado para venderla.
CAROLINA BOHÓRQUEZ
Corresponsal de EL TIEMPO
Cali