Un polémico decreto expedido por el gobernador
Luis Pérez Gutiérrez la semana pasada y que restringe “el consumo de sustancias sicoactivas en los espacios públicos, educativos y deportivos” de Antioquia, desató una controversia en ese departamento.
Pérez argumentó que la decisión se tomó porque la protección de los derechos de los menores de edad prevalecen sobre los intereses de particulares, e indicó que los espacios públicos se degradan si en ellos hay consumo y distribución de marihuana, bazuco, cocaína, u otros estupefacientes.
“El espacio público tiene que ser para educar y no para pervertir a los ciudadanos a malas prácticas de vida. Este es un decreto que va a ayudar a la convivencia y a la excelente formación para niños y adolescentes, buscamos protegerlos y que no estén recibiendo mal ejemplo”, dijo el mandatario antioqueño.
La medida restringe el consumo entre las 6 a.m. y las 10 p.m., en parques públicos y escenarios deportivos; de 6 a.m. a 8 p.m. en 100 metros a la redonda de los establecimientos educativos de preescolar, básica y secundaria; de 8 a. m. a 8 p. m. en 50 metros a la redonda de las bibliotecas, ; y de 5 a. m. a 8 p. m. en las diferentes ciclorrutas del departamento.
Las multas por infringir el decreto oscilan entre 16 y 32 salarios mínimos mensaules legales vigentes.
Pese a que el propio presidente, Iván Duque, celebró la decisión del gobernador Pérez en la pasada asamblea de Ministros de Justicia de Iberoamérica que tuvo lugar en Medellín, al asegurar que “la lucha contra el narcotráfico también es la lucha contra el microtráfico y los expendedores que se acercan a los colegios o a los parques para intimidar a la juventud”, otras voces discreparon de la medida y la tildaron de absurda y anticonstitucional.
De hecho, el diputado del Polo Democrático, Luis Peláez, planea presentar en los próximos días una acción de nulidad ante el Tribunal istrativo de Antioquia y una denuncia por extralimitación de funciones contra el gobernador ante la Procuraduría General de la Nación.
El gobernador quiere crear normas por fuera de la ley. Él y quienes firmaron el decreto están haciendo extralimitación de sus funciones
“El gobernador quiere crear normas por fuera de la ley. Él y quienes firmaron el decreto están haciendo extralimitación de sus funciones”, dijo Peláez.
Daniel Suárez, activista social y organizador de los Concervezatorios en Medellín, manifestó por su parte que el debate sobre el uso de drogas y la convivencia en espacios públicos se está llevando de manera equivocada.
Según el activista, con la fijación de horarios, Pérez “se está curando en salud de generar una restricción completa”. También le recomendó al mandatario crear zonas de tolerancia para consumidores de sustancias sicoactivas.
Otros opinadores comentaron que la prohibición, además de ser inconstitucional y limitar los derechos de los antioqueños, puede dañar el tejido social. “Con esta decisión, el gobernador Pérez no aporta a la convivencia aunque así se quiera hacer parecer. Al generar una prohibición absoluta se puede crear una estigmatización a los consumidores y un enfrentamiento con las fuerzas públicas”, dijo David Ponce Patiño, sicólogo y activista de la comunidad Canábica Colombiana.
De acuerdo con la Gobernación de Antioquia, gracias al nuevo ‘pico y placa’ para el consumo de dogas en Antioquia, los alcaldes, como autoridad policiva de los municipios, tendrán la facultad de incluir más lugares en la restricción si consideran que se afecta la salud y el libre desarrollo de los niños y adolescentes.
El acalde de Medellín, Federico Gutiérrez, indicó por su parte que su istración se encuentra afinando los últimos detalles del decreto que regulará el consumo de estupefacientes en esa ciudad, el cual sería anunciado en los próximos días.
Cabe recordar, que el mandatario de los medellinenses fue uno de los primeros en mostrarse en contra del fallo de la Corte Costitucional que volvió a permitir el consumo de drogas y alcochol en los sitios públicos del país.
MEDELLÍN.