La historia de Leidy, la elefanta que están exhumando en Hacienda Nápoles

Tras nueve años de haber sido sometida a una eutanasia, el cuerpo de la elefanta Leidy está siendo exhumado en la Hacienda Nápoles, en el municipio de Puerto Triunfo (Antioquia).

Leidy fue uno de los especímenes paquidérmicos más longevos del mundo y vivió sus

últimos 31 años de vida en el Parque de la Conservación de Medellín (que antes se conocía como el Zoológico Santa Fe), donde le prestaron todos los cuidados luego de que, por muchos años, fuera utilizada como un atractivo comercial en varios circos del país y del mundo.

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El proceso de exhumación comenzó este lunes y se extenderá hasta el miércoles, por parte de la Unidad Forense Veterinaria de Universidad Remington y profesionales del Parque Temático Hacienda Nápoles.

El proceso se lleva a cabo en este sitio, ubicado en el Magdalena Medio, debido a que luego de su muerte, el 10 de marzo de 2012, el cuerpo de la elefanta Leidy fue trasladado al Parque Temático Hacienda Nápoles, en donde yace sepultada en un

terreno que es considerado como un santuario para la flora y fauna.

Jorge Caro, médico veterinario del Parque Temático Hacienda Nápoles, explicó que en su momento se evidenció el deterioro marcado en la salud de esta elefanta asiática, por su edad, por lo que le fue aplicada la eutanasia.

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"Dado eso, se le practicó la eutanasia ese mismo año y se tomó la decisión de traer a Leidy hacia las instalaciones de acá del Parque Temático. Es un cadáver atípico, es un animal de toneladas que debe ser puesto de una forma sanitaria legalmente correcta y aparte de eso Medellín no es el lugar idónea para esa situación", expuso el médico veterinario.

Debido a que el lugar de sepultura tiene unas dimensiones de seis metros

de largo por cuatro metros de ancho, los médicos tardarían cerca de tres días para lograr la exhumación completa del espécimen y, aproximadamente, 160 días para realizar su reconstrucción.

Caro subrayó que al ser enterrada allí se pensó específicamente en "poder recuperar posteriormente esta osamenta (conjunto de huesos), este espécimen, era realmente valioso"

Los huesos de la elefanta serán trasladados a la Clínica Veterinaria Uniremington, en el corregimiento de Santa Elena de Medellín.

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"Nuestra misión es extraer más del 90 por ciento de la osamenta de esta gran elefanta, de este imponente animal que vivió tantos años en Colombia y posteriormente poder hacer algunos análisis del orden forense, y que tenemos disponibilidad hoy en nuestro país, para que de manera ulterior podamos armar esta osamenta para que tenga fines didácticos, académicos y científicos", detalló Julio César Aguirre Ramírez, decano de la Facultad de Medicina Veterinaria de Uniremington y médico forense.

En la clínica, los médicos veterinarios forenses realizarán los procesos de osteotecnia, tanatología y tanatopraxia, los que hacen referencia a la higienización, conservación, embalsamamiento, restauración, reconstrucción y cuidado estético del cadáver de la elefanta.

Leidy se encontraba en el Parque Zoológico Santa Fe desde 1981, época cuando fue donada por un empresario, quien previamente la había adquirido al Circo Modelo de Bogotá, según reposa en los archivos de este parque.

Su muerte se dio tras más de 10 días sin que la elefanta Leidy respondiera a los medicamentos que trataban de calmar su infección urinaria y luego de cuatro años de deterioro físico constante.

En su cuerpo se realizó la primera autopsia de un elefante en el país, que contó con la presencia de 10 veterinarios. Antes de enterrar el cuerpo realizaron un rito africano.

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En la necropsia que le fue practicada en terrenos de la Hacienda Nápoles se estableció que el animal se encontraba en excelentes condiciones orgánicas y funcionales. Según informó Martha Cecilia Ocampo Mejía, Médica Veterinaria del Parque Zoológico Santa Fe, "Leidy presentaba buena condición corporal. Sus órganos, como hígado, páncreas, corazón y pulmones estaban aparentemente normales".

Desde ese momento, se esperaba que su armazón pudiera ser recuperado y reconstruido con fines educativos. De hecho, en su momento le fue aplicado un tratamiento de cal y arena, con el que se debía esperar dos años para desenterrarla y armar el cuerpo.

MEDELLÍN