En La Mojana descubren 42 puntos críticos más por donde el Río Cauca puede causar más daños

Francisco Gómez Osorio, líder de la región y ex alcalde del municipio de Majagual manifestó en la Comisión Sexta del Senado de la República, que en estos momentos hay hambre en la región y solicitó al Gobierno Nacional que envíe comida en forma urgente a estas familias.

El director de la Unidad de Riesgos, Carlos Carrillo manifestó durante el debate de control político que se hizo en el Congreso de la República que, a raíz de la forma como el río Cauca se llevó los trabajos complementarios en cara de gato, se envió a la zona un grupo de ingenieros, quienes verificaron la situación en diferentes sectores afectados.

“El problema es grande en La Mojana, son 42 puntos comprometidos en la región”, señaló el funcionario durante el debate de control. 

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Entre los puntos críticos de la región de La Mojana, además de cara de gato se encuentran, ‘Los Arrastres’, un sector ubicado en jurisdicción del municipio de Guaranda, por donde penetró el agua después de cara de gato.

En total 11 poblaciones, entre corregimientos y veredas se inundaron, entre estas toda la región de La Sierpe y Las Candelarias, Humo Abajo, donde las familias lo perdieron todo.

Se suma a estos dos puntos, el llamado ‘Boca de las Mujeres’, ‘Boca del Cura’, ‘El Chorro de Arelys’, ‘Punto G’, ‘Boca de los Moncholos’, ‘Boca de Cejebe’, ‘Brisas del Río’, entre otros sectores en los municipios de Sucre (Sucre), La Villa de San Benito Abad, Majagual, San Marcos.

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Para líderes de la región y ex funcionarios de la Unidad de Gestión de Riesgos en el Departamento, el informe sobre los puntos críticos no es nuevo y se conoce desde hace cerca de seis años.

En estos momentos la situación en los pueblos de La Mojana es delicada, en especial en las zonas rurales de Guaranda, Majagual, (Sucre) y La Villa de San Benito Abad.

De acuerdo con el más reciente censo que entregaron las autoridades, por lo menos 40 mil hectáreas de cultivos se han perdido y más de 280 mil cabezas de ganado fueron trasladadas a otras regiones del Departamento.

La oficina de riesgos de Sucre comenzó a atender a los damnificados, en compañía de los alcaldes de la región.

Muchas de las familias se ubican en cambuches sobre las vías principales y el problema más delicado es la falta de alimentos y de toldillos para soportar la cantidad de zancudos que los afectan en horas de la noche.
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Francisco Javier Barrios
Especial para EL TIEMPO
Sincelejo