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'Los Billis', la impactante historia de la pandilla juvenil más famosa de Bogotá
Una serie de Prime Video cuenta esa historia y rinde un tributo a los ochenta
En 1985 David soñaba con unos tenis Reebok; tenía aferrado a su cuerpo (como una especie de riñón amarillo) un walkman Sony, pero su verdadera obsesión era ser parte de una pandilla de adolescentes que, cuando dejaban sus uniformes de colegio en la casa, se convertían en Los Billis. Caminaban por el barrio Multicentro y ‘parchaban’ en el gran centro comercial que mandaba la parada en la Bogotá de esa época.
Eran los tiempos de la moda colorida, del new wave y de algunos niños ricos y otros de clase media alta queriendo convertirse en los más duros de la ciudad, creciendo entre las maquinitas y el Atari; viendo la televisión a color y queriéndose tragar el mundo en una época en la que lo más bacano era tener unos jeans estadounidenses Levi’s, alquilar La naranja mecánica en Betatonio y pelear con las pandillas de otros barrios después de una fiesta con música de Yazoo o de Cindy Lauper.
Y fue la época en la que creció esta banda de chicos del que se crearon varias leyendas: eran malos y estaban de moda, eran los que mejor bailaban y el modelo de otros como David, quien estaba comenzando a vivir un cambio, una necesidad de aventura, de chicas y de ser parte de algo, a pesar de la violencia o el peligro. Él quería más que unos zapatos de marca.
En ese contexto se mueve la trama de la serie colombiana Los Billis, inspirada en la historia de una banda de adolescentes que no tenían límites y que se esforzaron por crear un vínculo de hermandad y violencia en un país en el que la violencia política y el narcotráfico delineaban un presente oscuro para esa generación.
Una pandilla de adolescentes Foto:Prime Video
En su burbuja de ‘niños bien’ con alma extrema, Los Billis fueron parte de la radiografía de una década; la serie que se estrena en Prime Video toma parte de todas esas aventuras y conflictos, para dar paso a una trama que retrata esos años ochenta con sus excesos, su colorido y hasta su inocencia.
David fantaseaba con esa vida y cuando tiene la oportunidad de entrar en el círculo de los ‘pandilleros cool’ es cuando la tensión se revela en esta aventura creada por Diego y Daniel Ayala López, quienes tienen muy claro ese trazo de juventud que querían contar en la serie.
“Algo que nos interesó mucho de la historia era precisamente eso que no se ha mostrado, siempre se hablaba mucho del tema en los ochenta y noventa, pero no vimos cómo todo eso afectaba a la juventud y cómo era crecer con esa imagen del duro, del macho, la rebeldía que iba creciendo con la influencia de la música, las películas de pandilleros, entre otras cosas”, dice Daniel Ayala en una charla con EL TIEMPO.
“Más allá de la violencia y las drogas, lo que nos atrajo del proyecto fue cómo era ese movimiento cultural que los rodeaba: las pintas eran importantes, ser melómano era importante, ser cinéfilo era importante”, agrega su hermano Diego.
Los Billis no es una serie que quiera satanizar del todo a sus protagonistas, por momentos hay ternura, empatía y hasta trazos de drama de los chicos y chicas que un día son un pan de Dios en sus casas y luego no tienen miedo de molerse a golpes con una pandilla rival de Santa Bárbara.
Una pandilla de adolescentes Foto:Prime Video
David, el personaje, genera simpatía y ‘El indio’, el líder de Los Billis, esconde en una coraza de supuesta maldad una necesidad de ser aceptado y querido.
La producción fue todo un reto: fue un proceso largo investigar y descubrir la estética, la belleza y los contrastes de esos ochenta, sumado a cosas como no poder grabar en Unicentro, ni en el verdadero Multicentro.
Hay canciones de Joy Division, de David Bowie, de la banda Toto, el merengue de Wilfrido Vargas, o Kool and the Gang y de The Communards".
“Nos tocó buscar por todo Bogotá dónde recrearlos (...). En Puente Largo o Pasadena, lugares que se parecían muchísimo”, explica Daniel.
“No se trataba de contar una historia biográfica de nadie, sino una historia que atrapara la esencia de la cultura ‘Billi’, lo que significaba ser parte de ellos, recalca.
“Ellos se creían malos por las películas que vieron, por la apropiación cultural, por la llegada del postpunk y el pop, creo que esta es la serie que más licencias tiene. Hay canciones de Joy Division, de David Bowie, de la banda Toto, el merengue de Wilfrido Vargas, o Kool and the Gang y de The Communards
Julián Zuluaga, quien interpreta a David y es el eje de toda la trama, define muy bien el alma del proyecto haciendo referencia a que se trata de una serie de una época donde de lo que se trataba era de estar con los amigos, en las fiestas, en el parque.
“Mi personaje, de unos 15 años, quiere dejar de jugar Pac-Man, quiere crecer en una época en la que la violencia era la manera de expresarse y mostrar poder. Hay cosas delicadas en la serie, pero viéndola desde un plano general Los Billis claramente expone el riesgo que se asume al querer pertenecer a algo en lo que posiblemente no encajas, es una serie hermosa, pero con claroscuros”, finaliza Zuluaga, quien descubrió en el rodaje el walkman, el verdadero mejor amigo de David.