La mañana del miércoles 20 de marzo, se confirmó el fallecimiento de la activista Elena Larrea, reconocida por fundar Cuacolandia, un santuario que acoge a caballos rescatados de maltrato y abandono.
A través de la plataforma X, el gobernador de Puebla, Sergio Salomón, lamentó profundamente la partida de Larrea, destacando su incansable lucha por el bienestar animal. "Lamento profundamente el deceso de Elena Larrea, una luchadora incansable por la defensa del bienestar animal. El rescate de miles de equinos en condiciones de maltrato deja testimonio de su vida y obra", expresó Salomón.
Elena Larrea, según recoge su perfil en el sitio linktr.ee, era una influencer, modelo de contenido para adultos y la mente maestra detrás de Cuacolandia. En su cuenta de Instagram, compartía momentos con los caballos rescatados y promovía iniciativas para sensibilizar sobre la crueldad animal.
Cuacolandia, el santuario que fundó, brinda un refugio seguro para caballos rescatados, siendo su principal objetivo proporcionarles un lugar donde puedan vivir en paz, lejos del maltrato humano.
Guiada por su amor hacia los caballos y su convicción de que merecían justicia, Larrea dedicó su vida a la defensa de los animales. "Tenemos como 3 años desarrollando el proyecto, y ya como activos y recibiendo caballos, alrededor de un año. Son seres sintientes, y animales que tienen los mismos derechos que el resto de las especies. Son igual de importantes que las mascotas, por ejemplo, los perros y los gatos, que hay millones de albergues y santuarios. Y pues tal vez los caballos son más invisibles, y quisiera darles un lugar en donde estén a salvo y donde puedan vivir su vida en paz", expresó Larrea en una de sus declaraciones.
La partida de Elena Larrea deja un vacío en la lucha por los derechos de los animales, pero su legado perdurará en cada caballo rescatado y en cada corazón sensibilizado. Que su memoria inspire a seguir luchando por un mundo más compasivo y justo para todas las criaturas.
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*Esta información fue reescrita con la asistencia de una inteligencia artificial basada en información de El Universal de México (GDA) y contó con la revisión de una periodista y un editor.