Famosos implicados en el caso 'Diddy' habrían indemnizado a víctimas para que no denuncien, según afirma abogado

Varias celebridades que estaban en peligro de verse involucradas en las acusaciones contra Sean 'Diddy' Combs, también conocido por su nombre artístico P. Diddy, han llegado a acuerdos con las personas afectadas. 

Este movimiento ha sido hecho con el objetivo de evitar que sus nombres aparezcan en los titulares, según declaró Tony Buzbee, abogado relacionado con el caso.

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Buzbee señaló a TMZ que algunas figuras importantes están tomando acciones debido a la preocupación de que podrían ser acusadas seriamente en un futuro cercano. Diddy enfrenta cargos relacionados con tráfico sexual y actividades de crimen organizado, y hasta el momento, más de 120 víctimas han hablado. 

No obstante, algunas de estas celebridades han logrado eludir las repercusiones públicas al actuar de forma anticipada.

"Todo el mundo está concentrado en descubrir qué otras celebridades estuvieron implicadas, quién será nominado y quién será revelado", expresó Buzbee.

"No espero que eso ocurra esta semana. Queremos asegurarnos de que, si mencionamos a alguien más que no sea Combs, hagamos bien nuestra tarea, porque eso desatará una tormenta, y lo entendemos. Si estuviste en la sala, participaste, fuiste testigo y no dijiste nada o ayudaste a encubrirlo, en mi opinión, tienes un problema".

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Buzbee también aseguró que perseguirá los casos contra cualquier infractor de manera "agresiva" y destacó que el alcance de los hechos es extenso. 

"Mucha gente fue testigo de estas actividades, muchos permitieron que ocurrieran, no dijeron nada ni intervinieron... Todas esas personas y entidades han sido reveladas". 

El rapero Diddy fue arrestado bajo cargos relacionados con tráfico sexual y agresión. Según Buzbee, se han enviado cartas de demanda a otras celebridades y figuras de alto perfil con el fin de ofrecerles la oportunidad de llegar a acuerdos discretamente.

Buzbee explicó que, en todos los casos, y especialmente en situaciones como esta, se ha intentado resolver los problemas sin necesidad de presentar demandas públicas, ya que esto beneficia a las víctimas.

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"Ya hemos logrado acuerdos con algunas personas, muchas de las cuales son ampliamente conocidas", afirmó.

Anteriormente, Buzbee había comentado sobre el elevado número de llamadas que él y su equipo recibieron con denuncias contra Diddy. De las 120 personas a las que representa actualmente, 25 aseguran que eran menores de edad cuando supuestamente fueron abusadas.

Tras el arresto de Diddy, las amistades del rapero con otras celebridades quedaron bajo un intenso escrutinio. Imágenes de sus fiestas resurgieron, con varios invitados y testigos hablando sobre los excesos que solían ocurrir en esos eventos. Buzbee había mencionado anteriormente que los nombres revelados durante el curso de la investigación sorprenderían a muchos.

"Es una lista extensa", afirmó Buzbee, "pero debido a la naturaleza de este caso, nos aseguraremos, completamente, de tener absoluta certeza antes de hacer cualquier revelación".

La acusación contra Diddy está firmada por Damian Williams, Fiscal de los Estados Unidos para el Distrito Sur de Nueva York. Williams, quien se convirtió en el primer hombre negro en ocupar este cargo, fue designado por el presidente Joe Biden en 2021.

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Entre sus casos más destacados, fue el encargado de presentar la acusación contra Ghislaine Maxwell, quien fue condenada en 2022 a 20 años de prisión por su participación en el reclutamiento y acoso de niñas y mujeres para ser abusadas por el empresario Jeffrey Epstein, fallecido en 2019.

De acuerdo con la prensa estadounidense, la defensa de Diddy ofreció una fianza de 50 millones de dólares para que pudiera esperar el juicio en libertad. Sin embargo, el tribunal determinó que Diddy permanecerá detenido hasta el juicio debido a su historial de conducta y consumo de drogas, así como al riesgo de que el rapero y su mánager interfieran con los testimonios de los testigos. La decisión también sostiene que Diddy representa un peligro para la seguridad de la comunidad.

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Según la acusación, Diddy utilizó las instalaciones de sus negocios en Nueva York y Los Ángeles para llevar a cabo actividades ilícitas. Las empresas mencionadas por la fiscalía incluyen Bad Boy Entertainment, Combs Enterprises y Combs Global. 

Estas compañías, agrupadas bajo el nombre "Combs Business" en el proceso judicial, abarcan una amplia gama de actividades comerciales, como sellos discográficos, estudios, marcas de ropa, negocios de bebidas, una agencia de marketing, una cadena de televisión y una compañía de medios. 

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Según el documento de la fiscalía, Diddy manipulaba a las mujeres para que participaran en actos sexuales cuidadosamente organizados, en los que también participaban trabajadores sexuales masculinos. 

Desde 2009, Diddy ha sido acusado de ejercer violencia física contra mujeres, golpeándolas, causándoles lesiones con puñetazos, arrastrándolas, pateándolas y arrojándoles objetos, según las denuncias presentadas.

En marzo de 2024, las autoridades realizaron registros en las residencias de Diddy en Miami y Los Ángeles, donde hallaron suministros que se habrían utilizado en los presuntos ataques, entre ellos drogas y más de mil botellas de aceite y lubricante para bebés. 

Durante los mismos operativos, se encontraron armas y municiones, incluidos tres rifles AR-15 con los números de serie borrados. Ese mismo mes, la policía confiscó el equipo electrónico que Diddy llevaba consigo mientras se disponía a viajar desde el aeropuerto de Miami hacia las Bahamas. El contenido de este equipo aún no ha sido revelado por las autoridades.

El fiscal asegura que Diddy mantenía el control sobre sus víctimas mediante el uso de violencia física, la promesa de oportunidades laborales, otorgando y amenazando con retirar apoyo financiero, además de rastrear su ubicación, controlar su apariencia y hogar, monitorear sus registros médicos y proporcionar sustancias controladas.

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También se usaron grabaciones de video para garantizar la obediencia y el silencio de las víctimas, y se emplearon imágenes comprometedoras como forma de amenaza.

Aunque desde 2023 se han hecho públicas acusaciones sobre los abusos cometidos por Diddy, la fiscalía sostiene que la estructura de silenciamiento que él y sus asociados crearon incluía persecuciones a las víctimas, violencia física, amenazas de daño financiero o reputacional, y abuso verbal. 

Entre los actos de violencia mencionados están secuestros, incendios provocados, lanzamiento de objetos a empleados, asfixia, empujones y arrastres. El soborno también fue utilizado para proteger a Diddy.

Según la acusación, los freak offs eran eventos elaborados con actuaciones sexuales organizadas y dirigidas por Diddy. La fiscalía afirma que Diddy se masturbaba durante estos actos y grababa todo en video. 

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Estos eventos escandalosos se prolongaban por varios días, y para llevarlos a cabo, Diddy y sus asociados transportaban trabajadoras sexuales desde otros estados de EE. UU. e incluso desde el extranjero.

Durante los freak offs, se distribuían drogas y sustancias controladas con el propósito de disciplinar a las víctimas, quienes, al finalizar, recibían líquidos intravenosos para recuperarse del consumo de drogas y el agotamiento físico. Entre las drogas mencionadas por la fiscalía se encuentran la cocaína y la ketamina. 

Diddy enfrenta múltiples cargos. Según el 'New York Times', la pena máxima por conspiración para extorsionar es cadena perpetua; el delito de tráfico sexual mediante fuerza, fraude o coerción conlleva una condena mínima obligatoria de 15 años de prisión; y el cargo de transporte con fines de prostitución puede resultar en una sentencia máxima de 10 años de prisión.