Chris O'Donnell: fue Robin en 'Batman', perdió rol en 'Titanic' y tras alejarse del cine abrió su propia pizzería

Durante un tiempo, Chris O’Donnell estuvo en la lista de favoritos de los grandes estudios de cine. Era una opción seria para interpretar a personajes como Jack Dawson en 'Titanic', Peter Parker en 'Spider-Man' o el Agente J en 'Hombres de negro'. 

Sin embargo, al tomar otras decisiones profesionales, estos papeles terminaron en manos de Leonardo DiCaprio, Tobey Maguire y Will Smith.

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El actor, nacido en Winnetka, Illinois, mostró interés por el entretenimiento a los 13 años. “Vivía en Chicago y no sabía como meterme en ese negocio, así que empecé a leer las páginas amarillas y a llamar a agencias de talentos”, contó en el programa de Ellen DeGeneres. Su hermana Sally fue quien lo recomendó a un agente, dando inicio a su trayectoria. A los 16 años participó en un comercial junto a Michael Jordan para McDonald’s, lo que despertó el interés de los productores.

Durante los años noventa, participó en producciones como 'Men Don’t Leave', 'Fried Green Tomatoes', 'School Ties', y 'Scent of a Woman', donde compartió escenas con Al Pacino. Ese papel le valió una nominación al Globo de Oro como actor de reparto. Luego vinieron títulos como 'The Three Musketeers' y 'Blue Sky', antes de ser elegido para interpretar a Robin en 'Batman Forever '(1995), dirigido por Joel Schumacher y protagonizado por Val Kilmer como Batman.

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En 1997, volvió a encarnar al joven héroe en 'Batman & Robin', ahora junto a George Clooney. Esta producción lo alejó de otras oportunidades, como 'Titanic', que James Cameron le ofreció antes de dársela a DiCaprio. También declinó la propuesta de Steven Spielberg para protagonizar 'Hombres de negro', por lo que Will Smith fue finalmente seleccionado.

A pesar del reparto, 'Batman & Robin' fue un fracaso tanto en taquilla como entre los críticos, lo que afectó su reputación en la industria. Durante la promoción del filme, O’Donnell visitó Buenos Aires con el director y asistieron al programa de Susana Giménez. “Todos fueron increíbles con nosotros en Buenos Aires. La gente es hermosa y muy amable. ¡Y tienen buena comida!”, expresó Schumacher. Al despedirse, Chris saludó en español: “¡Hola Susana!”.

Más tarde, el actor reconoció que sentía que el rodaje era como hacer “un comercial de juguetes” y que ese período fue complicado. “Creo que la época más difícil de mi vida fue tras el estreno de Batman, porque fuera donde fuera todo el mundo, sabía quién era yo. En aquella época me ofrecían películas comerciales de enorme presupuesto, pero decidí llevar mi carrera por otro camino. Puse los frenos porque sabía que si seguía igual iba a terminar muy mal y probablemente no me hubiera casado”, dijo en una entrevista.

Tras esta etapa, se enfocó en su vida personal. Se casó en 1997 con Carolina Fentress, hermana de su mejor amigo, con quien tuvo cinco hijos: Lily Anne (25), Christopher ‘Chip’ Eugene (24), Charlie (21), Finley (19) y Maeve (17). Aunque siguió actuando, con papeles en Vertical Limit y la serie Grey’s Anatomy, no volvió a alcanzar la notoriedad de sus primeros años. También fue mencionado como posible protagonista en la trilogía de Spider-Man, aunque el papel se consolidó con Maguire.

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Frente a la dificultad de mantenerse vigente en el cine, O’Donnell encontró una nueva oportunidad en televisión. Participó en 'NCIS: Los Ángeles', donde trabajó junto a LL Cool J. La serie tuvo 323 episodios repartidos en 14 temporadas hasta su final en 2023. Juntos también crearon el reality 'Come Dance With Me' en 2022. 

En una entrevista, explicó: “La inseguridad profesional es algo que siempre está con nosotros. En la carrera de cualquier actor hay valles y montañas, es como jugar a la ruleta rusa. Nunca sabes cuándo te van a disparar. Es muy difícil mantenerse en lo alto del éxito durante mucho tiempo, solo unos cuantos lo pueden conseguir. Pero yo no me quejo, creo que he tenido suerte de poder reinventarme a los 40 con una serie que triunfa en la televisión como 'NCIS: Los Ángeles'”.

También habló sobre su visión de equilibrio entre trabajo y familia: “Eso fue algo que me enseñaron desde chico, que no debía solo disfrutar del éxito en el trabajo, porque cuando llegara el fracaso, podía dolerme mucho. Esas son elecciones de vida y lo que tengo ahora, es lo que quise siempre. Yo deseaba una gran familia y una vida hogareña estable. Afortunadamente y, toco madera, pude armar eso para mí y para mi familia, y el negocio del espectáculo es parte de eso".

En paralelo a su carrera en televisión, O’Donnell se dedicó a otro ámbito. En 1992 se graduó en Marketing en la Universidad de Boston, lo que le sirvió como base para desarrollar un proyecto gastronómico. Inspirado en las noches de pizza en su casa, fundó su propia cadena de pizzerías en California, llamada Pizzana. Allí aplicó sus conocimientos de negocios y su gusto por el ambiente familiar, estableciendo una nueva etapa profesional alejada del cine.

IRINA REPETTO

La Nación (Argentina) / GDA