¿Cuál es la fecha adecuada para poner el árbol de Navidad y para desarmarlo? Esto dice la tradición

Con la llegada de diciembre a la vuelta de la esquina, muchos ya comienzan a transformar sus hogares y oficinas con decoraciones navideñas. 

Celebridades, por ejemplo, han adornado sus casas desde inicios de noviembre. Sin embargo, surge una pregunta que muchos se hacen cada año: ¿hay una fecha específica para poner el árbol de Navidad?

(Lea también: ¿Cuál es el mejor lugar para pasar navidad en EE. UU. si es latino, según la IA?).

Según la tradición cristiana, la respuesta es afirmativa. De acuerdo con esta costumbre, el momento ideal para armar el árbol de Navidad es al inicio del Adviento, el periodo de cuatro semanas previo a la Navidad. 

Este año, el primer día de Adviento será el 1 de diciembre, un domingo, y se extenderá hasta la Nochebuena, que este 2024 se celebra el martes 24 de diciembre.

Hoy en día, no existe una regla estricta sobre el momento exacto para poner el árbol navideño; la decisión se deja a discreción de cada familia, como lo muestran las celebridades que ya han decorado sus hogares. En realidad, las tiendas han comenzado a ofrecer artículos navideños desde hace semanas, y muchos eligen instalar sus decoraciones mucho antes.

(Siga leyendo: Navidad 2024: cuatro ideas para decorar la puerta para las festividades).

El árbol de Navidad se ha convertido en un símbolo universal de las festividades, y su significado tiene raíces antiguas. Históricamente, la tradición de adornar árboles es parte de cultos y rituales en diversas culturas y religiones paganas, como una manera de festejar la fertilidad de la naturaleza. No obstante, no hay referencias en la Biblia sobre la fecha exacta del nacimiento de Jesús, y se presume que ni siquiera los primeros cristianos la conocían con certeza. 

Fue hasta el siglo IV cuando Roma, tras la conversión del emperador Constantino al cristianismo, fijó el 25 de diciembre como la fecha oficial para celebrar el nacimiento de Cristo. Esta decisión también permitió que la Fiesta del Sol Invicto, un culto al dios Mitra, fuera remplazada progresivamente por las celebraciones cristianas, integrando tradiciones como la de adornar árboles y dar regalos.

El vínculo entre el árbol y la Navidad se atribuye a San Bonifacio, un misionero que en el siglo VIII llegó a Alemania y, para contrarrestar el culto a Odín, introdujo el uso de un árbol en las festividades cristianas. 

(De interés: ¿Qué significa el árbol de Navidad y los otros adornos que brillan en la casa durante diciembre?).

Con el paso del tiempo, esta tradición se extendió a otros países europeos y llegó a Estados Unidos en el siglo XIX, popularizándose en América Latina hacia el siglo XX.

Las festividades concluyen tradicionalmente el 6 de enero, el Día de Reyes, que recuerda la llegada de los Reyes Magos al pesebre de Jesús. Esta fecha marca también el momento indicado para retirar las decoraciones navideñas. En el calendario cristiano, la misa del domingo siguiente se celebra como la Epifanía del Señor, un evento litúrgico que conmemora la "manifestación de Dios encarnado".

Además, esta celebración coincide con la recordación del bautismo de Jesús a manos de San Juan Bautista, dando inicio al Tiempo Ordinario en el calendario católico, un periodo en el que las lecturas y celebraciones religiosas ya no reflejan el espíritu navideño.

O Globo (Brasil) / GDA