"Después de tantos años de amistad, te nos fuiste repentinamente, sin avisar, ni dar indicios de nada, es fuerte tener que aceptar que dejamos de contar con tu presencia. Pero ten por seguro que siempre contaremos con el grato recuerdo de haberte conocido y de que hayas hecho de nuestras vidas, las más felices a tu lado".
Así comienza el mensaje que Paula Andrea Betancur, señorita Colombia 1992, escribió en sus redes tras enterarse del asesinato del ganadero José Guillermo Hernández Aponte, esposo de su amiga y también exreina María Mónica Urbina.
"Sabemos que tu espíritu seguirá con nosotros y cada vez que nos reunamos será imposible dejar de extrañarte y recordar los buenos momentos que siempre nos regalaste. Amigo, cómplice y padrino consentidor, en estos momentos Dios te está recibiendo con los brazos abiertos. Te vas solo físicamente porque en cada uno de nosotros queda lo mejor de ti. Feliz viaje hacia la eternidad. Te extrañaremos y cuidaremos de tu reina hermosa!! Amiga de mi corazón", escribió Betancur desatando decenas de comentarios en torno a la muerte de Hernández Aponte.
La Policía de Brasil asegura que el esposo de Urbina murió, el pasado jueves, tras ser víctima de un atraco en una calle de Uberaba, Brasil. Videos difundidos por EL TIEMPO dan cuenta de cómo el taxi en el que se desplazaba fue interceptado por dos sujetos que, al parecer, iban por su reloj Rólex.
La Fiscalía de Colombia ya pidió a sus pares de Brasil toda la información sobre el caso porque Hernández ya había sido víctima de 'la banda de los Rólex', que tiene tentáculos en varios países. Además, había sido mencionado dentro de la investigación por el crimen de Óscar Rodríguez, en 2011, el hijo de un conocido prestamista de Valledupar.
De hecho, EL TIEMPO estableció que ya había sido citado en dos ocasiones a entrevista. Además, que, poco después de ese crimen, recibió protección, por haber sufrido tres atentados, uno de ellos con una granada de fragmentación que estalló en su casa de Valledupar.
El cuerpo del ganadero fue repatriado el pasado sábado y enterrado este domingo en el cementerio Santo Eccehomo, en una ceremonia familiar.
REDACCIÓN EL TIEMPO