Aproximadamente unas tres mil personas viven en Medina, una pequeña ciudad ubicada en el estado de Washington, Estados Unidos.
Este es el hogar de algunos de los hombres
más ricos del planeta.
Esta zona, tanto exclusiva como desconocida, está llena de mansiones que cuestan, como mínimo, dos millones de euros (casi nueve mil millones de pesos colombianos).
El camino a Medina de por sí ya es deslumbrante. Para llegar es necesario atravesar el Evergreen Point, el puente flotante más largo del mundo (cuenta con una longitud de dos mil metros).
Una vez se llega a la ciudad, se puede apreciar el lago Washington, popular para practicar deportes acuáticos.
Es por esta razón que la mayoría de casas tienen un muelle y una playa privada. Además, es habitual ver motos de agua y personas haciendo esquí acuático, entre otras disciplinas sobre agua.
(Si nos lee desde la app de EL TIEMPO, puede ver la ubicación aquí). De acuerdo a la revista ‘Vanity Fair’, la seguridad de esta ciudad es parecida a la que se maneja en Indian Creek, una villa de Florida (EE. UU.) que alberga personalidades como el cantante Julio Iglesias y la empresaria
Ivanka Trump, hija del expresidente estadounidense
Donald Tump.
En Medina hay cámaras de seguridad en todos los rincones y existe un sistema que examina con detenimiento las placas de los carros que pasan por allí, verificando que no estén enlistados en los casos de delitos cometidos en el país.
Hay vigilancia policial las 24 horas del día. Es un lugar ideal para las personas que buscan tranquilidad e intimidad.
(Si nos lee desde la app de EL TIEMPO, puede ver la publicación aquí). La ciudad solo cuenta con Evergreen Point Road (la calle principal), una oficina de correos, una estación de policía, un vivero, un pequeño supermercado y el edificio de la Alcaldía. Pero con eso les basta y les sobra a las personalidades más ricas del mundo.
Para garantizar el entretenimiento de sus habitantes está el Overlake Country Club, un lujoso club de campo abierto que cuenta con un campo de golf, piscina, canchas de tenis y restaurantes de la más alta calidad.
Todo es exclusivo para ‘con invitación’.
(Si nos lee desde la app de EL TIEMPO, puede ver la publicación aquí). La mansión más grande
El magnate
Jeff Bezos, fundador de Amazon y dueño del Washington Post y de la compañía aeroespacial Blue Origin, tiene la mansión más grande de la zona. Además,
la sede de Amazon también queda en Medina.
Según ‘The New York Times’, esta finca le costó 53 millones de dólares (193 mil millones de pesos) y la obtuvo en 1998. La parcela principal es de 21 mil metros cuadrados, en los que tiene su vivienda de casi dos mil metros y una ‘casita’ adicional de 770.
(Si nos lee desde la app de EL TIEMPO, puede ver la publicación aquí). Cuenta con 11 habitaciones y 25 baños. Sus espacios están equipados con la tecnología más avanzada.
Tienen una amplia playa privada y un embarcadero propio con barcos de diferentes tamaños.
Esta es una más de sus lujosas residencias, pues tiene otras casas en Beverly Hill, varios apartamentos en Nueva York y un rancho en Texas.
(Si nos lee desde la app de EL TIEMPO, puede ver la publicación aquí). ‘Xanadu 2.0’
Bill Gates, cofundador de Microsoft, también tiene una lujosa mansión en Medina, denominada
‘Xanadu 2.0’. Allí solía vivir con sus hijos y con su ahora exesposa Melinda French.
Fue adquirida por el magnate en 1988. Actualmente está valorada por una suma de entre 130 y 150 millones de dólares (474 a 546 mil millones de pesos).
La casa tiene un área de 6.200 metros cuadrados construidos con medio millón de tablas de madera de pino.
(Si nos lee desde la app de EL TIEMPO, puede ver la publicación aquí). Goza de exóticas tecnologías como la posibilidad de calibrar la temperatura de los diferentes ambientes y unos altavoces ocultos entre las paredes que permiten que la música esté en todas las habitaciones.
Entre sus múltiples lujos aparecen un cine para 20 personas, canchas deportivas, casa de huéspedes de 180 metros cuadrados, un garaje para 23 automóviles y un río artificial con salmones y truchas.
Esqueleto de T-Rex y más
En la ciudad de Medina también vive Nathan Myhrvold, quien fue compañero de Gates y es el dueño de Intellectual Ventures, un desarrollador de licencias de propiedad intelectual en las áreas de la tecnología y la energía.
Entre sus aficiones están los dinosaurios. Es por ello que tiene en su casa un esqueleto de tamaño real de un tiranosaurio rex.
(Si nos lee desde la app de EL TIEMPO, puede ver la publicación aquí). Parece que esta ciudad es el lugar ideal para las excentricidades, sin embargo, por la gran cantidad de seguridad no existe mucho registro fotográfico de los multimillonarios que allí residen.
No obstante, según ‘Vanity Fair’, existen lugares particulares como ‘Villa Windows 2000’, una mansión que cuenta con dos mil ventanas, y ‘la casa del arte’, una construcción ideada para exponer impresionantes obras artísticas de millones de dólares.
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