Las polémicas declaraciones de Carolina Cruz en ‘Día a Día’, a inicios del mes de marzo, volvieron a poner sobre la mesa el debate en torno a la explantación mamaria, un procedimiento quirúrgico en el que se realiza una extracción definitiva de las prótesis de los senos.
“Yo no estoy en contra de la explantación. Estoy a favor de que la mujer esté sana y se vea femenina. Lo que no me parece que es llevadero ni correcto es que ahora todas las mujeres, como fulanita en redes sociales empezó a hablar de este tema y sutanita, entonces se volvió una moda y empezaron a sacar citas médicas. Dicen que su depresión es eso", dijo Cruz en el programa de televisión.
Y, segundos después, añadió: "Se sacó las puchecas, quedó como un hombre, así plana como una pared, con una cicatriz horrible. Pero no, dice 'sigo deprimida, sigo con depresión, me levanto enferma'”.
Desde Norma Nivia hasta Claudia Bahamón, Lorena Meritano y Mabel Cartagena, fueron muchas las famosas que, tras los comentarios de la presentadora vallecaucana en plena emisión en vivo, decidieron alzar la voz y pronunciarse. A la lista se sumó, recientemente, la actriz y modelo colombiana Natalia Durán.
La experiencia de Natalia Durán con las prótesis mamarias
Natalia Durán, recordada por su participación en telenovelas como ‘Padres e hijos’, ‘A corazón abierto’ y ‘Corazones blindados’, estuvo como invitada en el podcast de su colega Santiago Alarcón, llamado ‘Meterse al Rancho’.
En medio de una tendida e íntima conversación con Alarcón, la actriz abrió su corazón y reveló detalles jamás contados del proceso que tuvo que pasar antes, durante y después de la explantación mamaria.
Durán contó inicialmente que, cuatro o cinco años después de ponerse implantes en los senos, su salud comenzó a deteriorarse. Los síntomas no llegaron de manera unificada. “Eran dolencias aisladas, pero muchas”, detalló la también presentadora.
Dentro de las señales de alerta se incluían arritmias cardíacas, síncope vasovagal, bajo estado de ánimo y pérdida de habilidades cognitivas, que de alguna u otra manera terminaron por repercutir directamente en su rol como madre, pero también en su carrera actoral: según contó, se le dificultaba aprenderse los libretos.
“Las cosas que sabes hacer fácilmente no son fáciles”, puntualizó Durán ante los micrófonos y añadió que algunos de los castings que sobrevinieron fueron un “desastre”, en parte, producto de la “nebulosidad mental” que, por esa época, opacaba su talento.
Uno tras otro, los síntomas siguieron presentándose sin explicación aparente para la actriz. Rápidamente pasó de gozar de buena salud a experimentar diferentes dolencias físicas que terminaron también por quebrar su estado emocional. De repente, “ya no quería viajar, no quería salir”.
“Yo llegué a googlear ‘formas de quitarme la vida sin dolor’. Varias veces estuve ahí. Es más, tengo escritos muy largos que ni siquiera he querido leer donde hablaba sobre lo que estaba pensando, me despedía. Hice ese ejercicio muchas veces. Era raro, porque en esos momentos de tanta oscuridad, la muerte era un alivio. Para ese entonces, yo estaba contenta de irme”, puntualizó la modelo caleña en uno de los momentos más íntimos de la conversación con Alarcón.
De acuerdo con su relato, la actriz ya había escuchado del síndrome de Asia, una reacción autoinmune o inflamatoria que se atribuye a una sustancia extraña en el organismo. No fue hasta que escuchó un podcast de Angelly Moncayo y Claudia Bahamón que los síntomas comenzaron a adquirir sentido.
Tomar la decisión de explantar sus prótesis no fue fácil, hacerlo implicaba enfrentarse a las críticas de la sociedad, pero también a las autoimpuestas. En medio de la realización de exámenes para diagnosticar la enfermedad, los especialistas se encontraron con que la actriz tenía cáncer con metástasis en los ganglios.
“Yo y varios médicos dicen que el cáncer que a mí me dio fue por el síndrome de Asia (...) A mí me dio cáncer de tiroides”, detalló Durán ante los micrófonos de ‘Meterse al Rancho’.
Aunque su decisión resultó impopular, la modelo decidió retirarse primero los implantes, antes de ponerle la cara al cáncer.
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REDACCIÓN ALCANCE DIGITAL
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