Junior, un gran fenómeno cultural, comienza a celebrar su centenario este domingo: ¿qué significa para Barranquilla?

Una vez, el escritor Álvaro Cepeda Samudio bautizó a Junior como la ‘Querida de Barranquilla’. Algunos interpretan el remoquete como esa relación de amores y odios entre la afición y el equipo.

El periodista deportivo y escritor Ahmed Aguirre Acuña explica que con esa frase prácticamente se estaba exaltando esa clase de amor putativo, diciendo que cuando a Junior le iba bien, la gente se sentía más feliz que incluso estando con la propia esposa.

En efecto, ahí están los hinchas preparando una gran actividad desde este domingo hasta el miércoles festivo, para lo que será la celebración de los 100 años del equipo ‘tiburón’.

Pero, realmente, ¿qué significa Junior para la ciudad más allá de la ‘Querida de Barranquilla’? Expertos y cercanos a la historia del club, fundado el 7 de agosto de 1924 por Micaela Lavalle, tratan de descifrar este fenómeno con la capital del Atlántico y el Caribe colombiano en general.

Un fenómeno que no se limita a figurar en una cancha de fútbol, sino que trasciende en otros campos, como en el Carnaval, con disfraces alusivos a la institución rojiblanca; en los agasajos, matrimonios y bautizos de los hogares barranquilleros, sin distinción de estratos, razas o creencias.

En diálogo con EL TIEMPO, uno de los que se animaron a describir el significado del ‘Tu Papá’ es precisamente Aguirre Acuña, autor de los libros Junior, una historia de diamantes (2003), Junior, pasión y alma Caribe (2015) y Ephanor y Dacunha, dos ases del fútbol (2021). 

“Junior es como una bella metáfora de sentimientos encontrados, sentimientos que contrastan de acuerdo con lo que nos brinde un triunfo o una derrota, porque cuando Junior gana somos los hombres más felices del mundo. Los papás se vuelven más papás, la mujer se vuelve más mujer, duermen embelesadas escuchando las narrativas de sus esposos sobre las genialidades de los jugadores del equipo”, cuenta el hombre.

Para Aguirre Acuña, Junior se convierte en una devoción especialmente para el pueblo de Barranquilla y la costa Caribe.

“Junior es el equipo a nivel nacional que quizá ha despertado más arraigo, a través de la historia. En sus tiempos del amateurismo, entre los años 30 y 40, fue considerado el mejor equipo que existía en el país. Era invitado por las ligas del interior del país, por Cali, Antioquia o Bucaramanga para representar a Colombia en competencias internacionales. Junior es como un símbolo o esa huella que no tiene distingo entre el bueno y el malo, entre el pobre y el rico. Cuando Junior gana, la felicidad es completa hasta los lunes, y cuando pierde, nos envuelve esa tristeza por no conseguir el objetivo. Es una devoción del pueblo que siempre gira alrededor de lo que acontezca”, señala el escritor.

Al respecto intervino el exdefensor de la Selección Colombia y de Junior Jesús ‘Toto’ Rubio, quien analizó lo que representa Junior para Barranquilla, bañada por río y mar.

“Nosotros fuimos elegidos como futbolistas para crear un sentimiento y un patrimonio de afecto a la sociedad del fútbol de Barranquilla, del departamento del Atlántico y de Colombia. Junior cumple 100 años de historia, de pasión y hago parte de esas personas elegidas para construir eso. Tuve la oportunidad de estar muchos años defendiendo la divisa de Barranquilla, siendo feliz, porque todo lo que se construye de ahora en adelante es como cuando construyes un edificio de 20 pisos, creas unos buenos cimientos”, señala el exfutbolista, de 79 años, y dos veces campeón con Junior, en 1977 y 1980.

“La idiosincrasia del barranquillero, la gente del Caribe tiene esa facilidad de apegarse a los afectos. Se apega al Carnaval y se apega al Junior, como una forma de explotar emocionalmente todo esto que brinda la alegría del Carnaval y la faena del equipo. Se mueve la emoción cuando Junior gana, se mueven las emociones, se mueve el mercado; pero cuando pierde todo decae. El Caribe colombiano es así y el barranquillero tiene esa particularidad”, destaca el ‘Toto’ Rubio en este medio.

El periodista deportivo y presidente de Acord Atlántico, Estewil Quesada, destacó la perspectiva que tienen los habitantes de esta región con los rojiblancos. “Junior es pasión, Junior es Barranquilla, Junior es una marca, una marca que dejó de ser de ciudad para ser de región, de todo el Caribe. Es, como lo dijo una vez Álvaro Cepeda Samudio, la ‘Querida de Barranquilla’, la que siempre se quiere”, afirma Quesada.

Para otros, Junior es un acto de fe, una dependencia emocional que el 7 de agosto celebra su centenario: ¡100 años de tu papá!

Deivis López Ortega

Corresponsal EL TIEMPO

Barranquilla