3 momentos y 4 conclusiones del primer partido de la final Tolima y Nacional (Meluk le cuenta)

Primer momento: un hombre de 40 caballos de fuerza abrió la cuenta. Al minuto 35, esta montaña de 1,80 metros de pura fibra y voluntad ganó dos choques en la mitad de la cancha a un mismo balón rebotado que cayó llovido.

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El segundo fue un duelo de titanes: Kevin Viveros sacudió a Marlon Torres –otra mole– en un pulso de hombros que provocó un terremoto con epicentro en el estadio Murillo Toro, de Ibagué. Tolima se rompió.

Entonces, Viveros, solo y con 40 metros por delante hasta el arco rival, fue una fecha verde inalcanzable: llegó en un suspiro a las 18 y recortó hacia adentro para burlar a un marcador que le apareció desesperado. Tiró: el portero Cuesta se acostó, manoteó de frente y Dairon Asprilla la metió. La anotación es suya, pero el gol es de Viveros, ese coloso de 77 kilos de músculo y fuerza.

Viveros fue una de las cartas de la mano sorpresa del técnico Efraín Juárez: puso todo un sistema de ataque nuevo y alineó a los suplentes: Viveros y Asprilla, dos de ellos. Los otros, Zapata y Ceppelini.

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Segundo momento: Sebastán Guzmán, volante de marca con guayos de alambre de púas, se tiró en plancha y rayó el pie de Junior Hernández. Segunda amarilla y expulsión correcta. Se tiró con los pies para adelante. Mínimo era amarilla y amarilla le dieron. Nacional, un equipo que bien sabe chocar, ser fuerte y sacar chispas y la piedra a su rivales, se quedó con 10 hombres. El momento bisagra del partido. Su técnico metió defensas y montó un muro en la frontera de su área chica.

Tercer momento: David González, el entrenador del Tolima, obvio, metió toda la artillería de ataque. No tenía alternativa: o buscaba el empate o buscaba el empate. Dejó un solo volante de marca y jugó con punteros bien abiertos, un armador y un doble ‘9’. Y así logró el empate: pase filtrado en globo de Guzmán, bajada de pecho de Gil y zapatazo lleno, pleno de Ramírez, que llegó del banco para anotar el 1-1.

*El 1-1 es ventaja teórica para Nacional, que no pierde de visitante y tiene la localía, otra ventaja teórica, para liquidar la final y levantar la estrella el domingo.

*Nacional solo atacó una vez en el segundo tiempo, en un contragolpe de humo que finalizó mal Román.

*Tolima rescató del ahogado el sombrero y sigue con vida. Incluso, de haber perdido 1-0 seguiría con vida. Tuvo valentía y corazón. El empate los hace soñar.

* Nacional sigue siendo el favorito para ser el campeón. Logró el resultado y se ve duro, y juega duro.

Meluk le cuenta...

Gabriel Meluk

Editor de Deportes

@MelukLeCuenta