Abecé del nuevo control sobre los taxímetros

Los llamados ‘muñecos’ en los taxímetros, que se pueden instalar desde 40.000 pesos en talleres ilegales, recibieron una nueva estocada por parte de la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC).

Esta entidad expidió la Resolución 88918, con la cual pone en cintura a estos aparatos, dictando reglas técnicas y metrológicas (de magnitudes) que deberán cumplir a partir del primero de julio próximo.

Así, los taxímetros deben estar diseñados para adaptarse al método de operación y a vehículos de servicio, además de que deben estar estructurados para ser inalterables en la información que reciben. Esto, debido a que los ‘muñecos’ modifican dichos parámetros, generando, por ejemplo, distancias erróneas o tarifas bases más elevadas.

Estas especificaciones serán revisadas por la SIC, para lo cual fabricantes e importadores deberán demostrar que tienen todo al día, a través de un certificado de conformidad. Paralelamente, el Organismo Nacional de Acreditación de Colombia (Onac) hará las veces de garante, ya que solo organismos verificados por esta entidad podrán revisar anualmente que estén funcionando correctamente, aspecto que será obligatorio.

En cuanto a instalación y reparación, solo podrán hacerlo talleres certificados, y en lo que se refiere a tarifas, la programación deberá incluir al menos banderazo, tiempo y distancias iniciales, valores de tarifa por tiempo y distancia (definidos por cada autoridad local), incremento por cargo complementario -solo si aplica- y valor de la carrera mínima.

“A raíz del gran número de quejas por la posible adulteración de taxímetros, se expidió este reglamento (…). Deben tener protecciones a posibles manipulaciones y además revisiones anuales”, explicó Alejandro Giraldo, superintendente de Reglamentos Técnicos. Y agregó que estos aspectos aplicarán a los instrumentos nuevos que se fabriquen localmente o ingresen al país a partir del primero de julio de este año, pero que aquellos taxímetros que hoy estén en uso deberán ser reemplazados en un tiempo no mayor a dos años y medio.

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