Desde abril se recuperaron más de 18.000 empleos por día

El desempleo en Colombia en diciembre fue de 13,4 por ciento, informó el Dane. Según el informe presentado este viernes, en el último mes del año se siguieron recuperando puestos de trabajo, luego de haberse tocado fondo en abril, primer mes de confinamiento total por la pandemia.

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Sin embargo, frente a diciembre del 2019 la tasa de desempleo sigue siendo mayor en 3,8 puntos porcentuales. Ese mes fue de 9,5 por ciento.

En diciembre pasado, el desempleo masculino fue de 10,1 por ciento (un año antes era de 6,9 por ciento), y el femenino fue de 17,9 por ciento (un año atrás era de 13,1 por ciento).

Aun cuando la tasa nacional de desempleo de noviembre último fue del 13,3 por ciento, es necesario tener en cuenta el análisis desestacionalizado que hace el Dane, dadas las particulares condiciones de la temporada de fin de año.

Bajo ese enfoque, la tasa nacional en diciembre fue del 14,3 por ciento frente al 14,8 por ciento de noviembre, lo que quiere decir que el desempleo se redujo 0,5 puntos porcentuales de un mes a otro.

En todo el país la población ocupada en diciembre fue de 21,4 millones de personas, 1,4 millones menos que en el mismo mes del 2019.

Vale anotar, sin embargo, que entre abril –mes en el que la población ocupada cayó, por efecto de las restricciones derivadas de la pandemia, a 16,4 millones– y diciembre se recuperaron alrededor de 4,6 millones de puestos de trabajo.

Así, la recuperación de puestos de trabajo, desde el peor momento, ha sido de más de 18.000 por día.

De hecho, entre noviembre y diciembre se registraron 200.000 empleos más.

Por otro lado, la población desocupada en el país fue 3’305.000 personas en diciembre, 907.000 más que en el mismo mes del 2019.

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El director del Dane, Juan Daniel Oviedo, llamó la atención sobre el peso que en esta materia están teniendo las dinámicas urbanas; de hecho, las 13 principales ciudades del país, y sus áreas metropolitanas, registraron 1,9 millones de desocupados, contribuyendo con 23,7 puntos porcentuales a la variación nacional.

Los inactivos, por su parte, sumaron 15,4 millones de personas, 945.000 más que en diciembre del 2019: “Hay un incremento importante de mujeres que salen de la fuerza laboral, entran a la clasificación de inactivos y se dedican a labores del hogar; del total de inactivos nuevos del mes pasado, 645.000 son mujeres”, explicó Oviedo.

La tasa nacional de desempleo promedio de enero a diciembre del 2020 fue del 15,9 por ciento, lo que representó un aumento de 5,4 puntos porcentuales frente al 2019 (10,5 por ciento). La tasa global de participación se redujo 4,1 puntos porcentuales frente al 2019 (63,3 por ciento) y se ubicó en 59,2 por ciento.

En cuanto a la tasa de ocupación, esta fue del 49,8 por ciento, lo que quiere decir que se registró una reducción de 6,8 puntos porcentuales con respecto al 2019 (56,6 por ciento).

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En las 13 ciudades principales y sus áreas metropolitanas, la tasa promedio de desempleo durante el año pasado llegó al 18,2 por ciento, lo que representó un aumento de siete puntos porcentuales frente al 2019 (11,2 por ciento).

“El saldo del 2020 –afirmó el director del Dane– nos muestra una salida de la ocupación de 2’444.000 personas, con respecto al 2019 (se pasó de 22’287.000 a 19’843.000, de un año a otro)”.

De ese total, 1’283.000 clasificaban en la posición ocupacional de obrero o empleado particular; 692.000 eran trabajadores por cuenta propia, y 169.000 eran empleados domésticos.

Por sexo, el número de mujeres ocupadas se redujo durante el año en 1,4 millones, mientras que en los hombres esta disminución fue de 1 millón.

En general, la tasa de desempleo entre ellos el año pasado fue del 20,4 por ciento para ellas y del 12,7 por ciento para ellos.

En cuanto a las ramas del sector productivo que aportaron más al desempleo el año pasado, cabe decir que de los 2,44 millones de personas que salieron de la ocupación, 473.000 estaban en la franja de comercio y reparación de vehículos; 390.000, en actividades artísticas, de entretenimiento, recreación y otras actividades de servicio; 317.000, en istración pública y defensa, educación y atención de la salud humana; 316.000, en la industria manufacturera; 266.000, en alojamiento y servicios de comida; 185.000, en agricultura, ganadería, silvicultura y pesca, y 166.000 en construcción.

La única rama que mostró crecimientos en empleo fue la de suministro de electricidad, gas, agua y gestión de desechos, con 34.000 ocupados más.

Para Oviedo, si se compara intertemporalmente, año a año, el volumen de población ocupada del 2020, se puede inferir un retroceso de aproximadamente una década en esta materia en el país, generado por los efectos colaterales de la pandemia, en la medida que se retorna a niveles registrados entre el 2010 y el 2011.

En total, las 23 principales ciudades del país y sus áreas metropolitanas acumularon un desempleo anual del 18,6 por ciento el año pasado.

Las ciudades que registraron los peores desempeños fueron Neiva, con 26,1 por ciento; Ibagué, con 25,6 por ciento, y Cúcuta y su área metropolitana, con 23,7 por ciento.

Las de mejor comportamiento en esta materia fueron Barranquilla y su área metropolitana, con 12,3 por ciento; Cartagena, con 14,6 por ciento, y Pasto, con 16,7 por ciento. En Bogotá y Medellín este indicador se ubicó en 18,2 por ciento, y Cali reportó 20,4 por ciento.

Cabe resaltar que en la pérdida de puestos a lo largo del 2020, hubo una presión muy grande de Bogotá. En tiempos normales, antes de la pandemia, la capital aportaba el 18,7 por ciento de los puestos de trabajo del país, pero puso el 22,8 por ciento de los trabajos que se eliminaron a nivel nacional.

Mientras todo el país , en el 2020 hubo, en promedio, 11 por ciento menos de personas trabajando, en Bogotá se registró un 13,3 por ciento menos.

El informe del Dane da cuenta de un incremento de la informalidad laboral. El mes pasado, en las 13 principales ciudades y sus áreas metropolitanas este fenómeno impactó al 48,6 por ciento de los trabajadores; un año atrás, ese porcentaje era del 46,1 por ciento (1,7 puntos porcentuales más).

De 10’101.000 ocupados en este ámbito geográfico, 4’906.000 son informales (252.000 menos que en diciembre del 2019), y 5’195.000, formales (648.000 menos que un año atrás). “Más de las dos terceras partes de la gente que entró a la desocupación ese mes se asocia con población ocupada formal. Quiere decir que la informalidad ha sido un canal de retorno de quienes salieron de la fuerza laboral durante la pandemia”, dijo Juan Daniel Oviedo.

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