Todos los colombianos se han preguntado si comprar o alquilar una propiedad, los detalles financieros juegan un papel crucial. Hoy, Claudia Uribe, asesora financiera certificada y experta en inversiones, desglosa ambas opciones para ayudar a los interesados a tomar una decisión informada.
Imagínese que una persona actualmente paga un alquiler mensual de $1.800.000. Sin embargo, considera comprar una propiedad valorada en 250 millones de pesos. Con un pago inicial mínimo del 30% (75 millones de pesos), tomaría un préstamo de 175 millones de pesos a un plazo de 20 años con una tasa del 16% efectivo anual. Esto resultaría en una cuota mensual de aproximadamente $2.295.874. Si a esto se le suman gastos adicionales como estudios ($120.000), istración ($280.000) e impuestos ($124.000), tendría un total mensual de $2.819.874, es decir, $1.019.000 más que el alquiler.
Si se considera una valorización anual del inmueble entre 4% y 7%, en 20 años, la propiedad inicialmente valorada en 250 millones de pesos podría estar valorada en cerca de 967 millones de pesos. Sin embargo, durante estos 20 años, la persona habría pagado en total aproximadamente 806 millones de pesos (incluyendo la cuota inicial, crédito, seguros, impuestos y istración). Si decide vender la propiedad en 967 millones de pesos, le quedaría un saldo disponible de 161 millones de pesos.
¿Qué pasa si se decide alquilar y en vez invertir el dinero?
Supongamos que se invierten los 75 millones de pesos de la cuota inicial y la diferencia mensual de $1.019.000 en instrumentos financieros con un rendimiento favorable. Después de 20 años, esos 75 millones de pesos podrían convertirse en aproximadamente 552 millones de pesos, y el ahorro mensual acumularía cerca de 783 millones de pesos, sumando un total de 1,335 millones de pesos. Durante este periodo, se habrían pagado un total de 694 millones de pesos en concepto de alquiler, ajustado también por inflación. Al final del plazo, quedarían 641 millones de pesos.
- Comprar: Ofrece la posibilidad de un retorno significativo si la propiedad se valoriza más de lo esperado. Además, ser propietario puede ofrecer estabilidad y la opción de capitalizar en un activo físico.
- Alquilar: Mantener la liquidez y la flexibilidad de invertir en otros instrumentos puede resultar más rentable a largo plazo, especialmente si esos instrumentos ofrecen altos rendimientos.
La decisión de comprar o alquilar dependerá de los objetivos financieros, la situación personal y las expectativas a futuro de cada persona. Claudia Uribe recomienda evaluar ambos escenarios con cuidado, considerar las necesidades individuales y consultar con profesionales para una orientación ajustada al perfil y circunstancias financieras de cada uno, aprenda más sobre este tema en las redes sociales de Claudia Uribe.