Nexos con 'paras', homicidios y apoyos políticos: el largo historial de alias La Gata

Desde que Enilce del Rosario López salió hace más de 20 años desde su tierra natal, en Sucre, hacia otros departamentos de la costa Caribe, empezaron los señalamientos de que algo en su emporio del chance no andaba bien.

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Esta mujer, conocida como 'la Gata' y que murió en la madrugada de este domingo, tenía encima un largo historial judicial y criminal que la llevó a estar presa en varias cárceles del país. La sentencia más conocida es la del asesinato del vigilante Amaury Fabián Ochoa en junio del año 2000, quien trabajaba en un peaje entre Cartagena y Sincelejo.

Ese crimen lo ejecutaron paramilitares, pero en los estrados judiciales se demostró que Enilce López tuvo participación en ello, y por eso en 2013 la condenaron a 37 años de cárcel en el Tribunal de Bogotá, decisión ratificada por la Corte Suprema. Mucho antes -en 2011-, en la primera instancia del caso, la habían sentenciado a nueve años, pues se comprobaron sus nexos con el paramilitarismo. 

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A esas andanzas llegó desde que su proyecto con el chance se expandió desde Sucre hasta otros departamentos del Caribe colombiano como Bolívar. Primero tuvo una empresa llamada Apuestas El Gato y, a medida que fue llegando a más partes, se le empezaron a conocer rumores cercanos al exnarcotraficante Gonzalo Rodríguez Gacha, alias El Mexicano; al Bloque Héroes de las Autodefensas, en los Montes de María -algo que ella negó-; al lavado de activos y al apoyo político a candidatos.

Tanto así que uno de sus hijos, Jorge Luis Alfonso López, llegó a ser alcalde de Magangué, Bolívar; y José Julio Alfonso López se presentó como representante a la Cámara. El primero de ellos es el famoso 'Gatico', recordado porque el año pasado salió de prisión tras recibir del Gobierno la figura de facilitador de paz. 

Actualmente, Jorge Luis está en detención domiciliaria pagando la pena de 27 años por el crimen del periodista Enrique Prins, también ejecutado por 'paras' en el año 2005.

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Volviendo a su mamá, la Fiscalía General de la Nación documentó en un primer momento -antes del homicidio del vigilante- un presunto lavado de activos que Enilce López habría adelantado en relación con el exjefe paramilitar Salvatore Mancuso.

Esos 300.000 millones de pesos que se habrían camuflado en empresas del juego de azar la llevaron a ser acusada junto a sus hijos y algunos empleados por los delitos de lavado de activos, enriquecimiento ilícito y concierto para delinquir, caso que además valió para ordenar su captura.

Esa orden se ejecutó en febrero de 2006, cuando por primera vez entró a la cárcel, siendo trasladada a El Buen Pastor, de Bogotá. Allí no duró ni un año, pues en noviembre la movieron a Santa Marta, y en 2007 se internó en la Clínica La Asunción, en Barranquilla. 

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La empresaria del chance quedó en libertad y, en 2013 -con la sentencia del Tribunal por la muerte del vigilante- fue privada nuevamente. Así fue como llegó al Hospital Cardiovascular de San Mateo, en Soacha. Se movió, por sus afecciones, entre varias unidades médicas.

Finalmente, en 2018 determinaron que tenía al menos 17 enfermedades, lo que le permitió que el año pasado un juez de ejecución de penas le suspendiera la sentencia para que pudiera tratarse sus percances de salud.

Paralelo al proceso que la llevó a ser condenada a los 37 años de cárcel, alias La Gata está vinculada en el asesinato de Nunilia Ester Collazos Díaz, en Magangué, en el año 2001, cuando la sentenciada ya había ganado poder.

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Lo que obra en ese caso es que López habría sido la determinadora del homicidio, ejecutado también por paramilitares. Exactamente, la investigación de la Fiscalía señala que ella se dirigió a Oswaldo López Gámez para que mataran a Collazos.

En el expediente que tiene el fiscal está el testimonio del exparamilitar Fernando Caro Solano, alias Magencio, quien aseguró que López Gámez era quien transmitía a las Auc las órdenes del clan de la ‘Gata’ para cometer homicidios.

Así como Enilce López promovió campañas electorales en la costa Caribe a punta de sus negocios con el chance, también lo hizo con aportes de carácter nacional. Hace años, por eso, trascendió que ella dio plata para la primera aspiración presidencial de Álvaro Uribe Vélez, en el año 2002.

Tras conocerse su muerte, el exjefe de Estado escribió este domingo en X que él sí reconoció que ella aportó dinero, y añadió: “Nunca escondemos aportes de campaña”.

"El aporte hizo parte de una contribución superior, de varias empresas que cumplían con todos los requisitos, una de las cuales estaba vinculada a López", sentenció Uribe.

El entierro de 'la Gata' se llevó a cabo en la tarde de este domingo en Jardines de la Eternidad, en Barranquilla, con personas cercanas a ella.

Carlos López

Redacción Justicia

En X: @CarlosL49