Coronel Núñez: juzgado lo envía a la cárcel por triple crimen en Chochó

Es procesado por el homicidio de tres jóvenes en Chochó, Sucre, el 25 de julio pasado.

14.09.2022 14:40 Actualizado: 15.09.2022 00:00

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Un Juzgado de Control de Garantías dictó medida de aseguramiento y envió a la cárcel al coronel en retiro de la Policía Benjamín Núñez, como presunto responsable del homicidio de tres jóvenes en Chochó, Sucre, el 25 de julio pasado, que fueron detenidos arbitrariamente, señalados falsamente de participar en el crimen de un policía ese mismo día, golpeados y asesinados.

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Núñez permanecerá detenido mientras avanza el proceso en su contra. El oficial, que se entregó en México, no aceptó los cargos que le imputó la Fiscalía y dijo que buscará una negociación con la Fiscalía General.

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Las víctimas son José Carlos Arévalo, de 21 años; Jesús David Díaz, de 20 años (estudiante y bailarín), y Carlos Alberto Ibáñez, de 26. Según la Fiscalía, los jóvenes estaban dedicados a sus cosas cuando fueron detenidos por uniformados en un sector conocido como la Y, subidos al platón de un carro de la institución y golpeados duramente.

Según la Fiscalía, que se basó en testimonios dados por otros policías, fue Núñez quien disparó a los jóvenes, estando ellos en total estado de indefensión, mermados, en custodia y uno de ellos atado de manos.

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El juzgado dijo que la medida tomada es necesaria al estimar que las evidencias hasta el momento expuestas dan cuenta de la gravedad de lo sucedido, de su rol como comandante operativo y de una posible afectación del caso si el oficial sigue en libertad.

"No hubo manifestación alguna de las razones por las cuáles eran detenidos. El señor Benjamín Núñez no puede sustraerse de dicha responsabilidad y tampoco procuró revisar el procedimiento de detención", dijo el juez.

Se evidencia el direccionamiento y actos posteriores para ocultar su ilícito y hacer parecer a los fallecidos como integrantes del 'clan del Golfo': juez

El funcionario señaló que sí hay indicios de que el oficial intentó alterar las pruebas del caso, dado que reunió a los uniformados a su cargo y les pidió que mintieran y se manipuló la munición.

"Esto es una evidencia firme de la intención que impera en Núñez para evitar ser juzgado. Se evidencia el direccionamiento y actos posteriores para ocultar su ilícito y hacer parecer a los fallecidos como integrantes del 'clan del Golfo'", agregó el juez.

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El funcionario tuvo en cuenta que Núñez salió el país en medio de la investigación para decir que mantenerlo en libertad puede poner en riesgo el proceso y, por eso, decidió dictarle una medida de aseguramiento en centro carcelario, pero a un pabellón especial para servidores públicos por su situación de riesgo.

El juez precisó que debe ser un sitio de reclusión istrado por el Inpec y no una cárcel para uniformados. La defensa del oficial apeló la decisión.

Lo que se tuvo en cuenta

El juez tuvo en cuenta las necropsias de las víctimas que detallaron las lesiones y heridas de los disparos que recibieron, las cuales evidenciaron que estos se hicieron a distancia de entre 30 y hasta 150 centímetros y que fueron puestos en una situación de indefensión. Y que apuntan a que el arma usada fue la del coronel Núñez.

Asímismo, tuvo en cuenta testimonios de los familiares y amigos de las víctimas que detallaron el momento en el que fueron detenidos, la preocupación de la comunidad sobre lo que pasaba y el hecho que Carlos Ibáñez, uno de las víctimas, no fue inicialmente retenido, sino que se quedó a ayudar a un amigo suyo que sí estaba allí y en el piso.

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Y que reseñan que uno de los jóvenes estaba herido previamente al hecho porque fue impactado, al parecer, por un policía, quien afanosamente estaba buscando dispersar a un grupo de personas. Por lo que lo montaron en una moto para buscar atención médica cuando fue detenido en el retén.

Además, reseñó que según las evidencias que se tienen hasta el momento, el agresor del patrullero que fue asesinado ese día, presuntamente es de contextura robusta. El juez del caso puso de presente los testimonios de los otros policías, sobre la forma como estaban ubicados los jóvenes, el hecho que decían que no habían hecho nada, entre otros.

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El fiscal señaló que Núñez se aprovechó de los jóvenes, que estaban golpeados, incluso uno de ellos estaba atado, y luego trató de encubrir los hechos.

"Usted, pese al haber gastado al menos siete cartuchos, los repuso para torpedear la investigación, pretendiendo con ello eludir su responsabilidad por la muerte de los tres jóvenes. Es así como usted conocía que estaba privando de la libertad a tres personas sin que mediara orden de captura, disparó con el fin de vengarse, lesionando la vida", dijo el fiscal del caso.

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Se llamaban Jesús David Díaz, Carlos Alberto Ibáñez y José Carlos Arévalo Foto:Archivo familiar

Oficial pidió protección por amenazas

En este proceso, el oficial envió una misiva en la que pidió que se le brinde seguridad alegando que ha sido víctima de amenazas, tanto él como sus esposa y tres hijos, tanto por lo que pasó por el tema del 'plan pistola' del clan del golfo.

Según dijo, la situación se seguridad motivó el traslado de su familia de Sucre a Bogotá. Además, dijo que por ya no estar en la Policía, estaría desprotegido.

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Abogado de víctimas denuncia amenazas

Aníbal Garay, uno de los abogados de las víctimas, dijo que el 13 de septiembre recibió amenazas en un mensaje de texto, que decían que si el coronel era enviado a la cárcel, su vida corría peligro.

Y señaló que también recibió una llamada de un hermano del coronel Núñez. Por eso, pidió que se oficie a la Policía Nacional para que se investiguen estos hechos que denuncia. Ante ello, la defensa del coronel ripostó y, por un momento, hubo un fuerte cruce de palabras.

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