Procuraduría pide a JEP investigar asesinatos de recién nacidos por parte de las Farc

Este jueves, la Procuraduría General de la Nación le hizo una solicitud a la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) para que incluya como un nuevo patrón criminal la desaparición forzada y el asesinato de recién nacidos por parte de las extintas Farc.

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El Ministerio Público conoció que al menos a 27 mujeres que fueron reclutadas de manera forzosa siendo menores de edad, les practicaron procedimientos para abortar a la fuerza con avanzadas semanas de embarazo. Incluso, algunos bebés fueron extraídos vivos de sus úteros, fueron asesinados y después desaparecidos.

Por tal motivo, el procurador delegado ante la JEP, Christian Wolffhügel Gutiérrez, le pidió a la JEP en un documento que "se investiguen los siguientes hechos: aborto forzado en edad gestacional avanzada; asesinato de neonatos; lesiones dolosas al feto; y, desaparición forzada de neonatos y las facetas de género que se relacionan con estas conductas”.

Esa práctica al parecer fue sistemática en varios bloques de la entonces guerrilla, en los que había un médico que se encargaba de hacer los procedimientos en grupos de 10 personas, que también incluían a guerrilleras del Eln.

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“Las mujeres de las Farc y del Eln eran reunidas en algunas ocasiones para realizar los abortos, les ponían Cytotec y con una chupa absorbían para sacar los bebes (…) siempre habían 5 o 10 mujeres”, fue el testimonio de una de las víctimas.

El documento dirigido a la magistrada de la JEP Lily Andrea Rueda dice que uno de los bebés fue lanzado vivo al río Guayabero: "Con ocho meses de gestación, en contra de su voluntad, le sacaron a su hija y la lanzaron viva al río. En su relato indica que la escuchó llorar, se la arrebataron de sus brazos y la lanzaron al río Guayabero".

Otro relato dice que alias el Mono Jojoy, entonces cabecilla de las Farc, se dio cuenta de que una mujer de la agrupación estaba embarazada, por lo que ordenó que le hicieran un legrado. Está documentado que le dieron tres pastillas para abortar, y como no les funcionó, le repitieron la dosis. "Ese día les hicieron el legrado a cuatro mujeres más, una con ocho meses de embarazo. Fueron a escondidas a buscar los restos y encontraron a los bebés, en pedacitos. Después de eso, la castigaron poniéndola a ranchar", dijo la Procuraduría.

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Otra mujer ocultó el embarazo hasta que pudo, hasta cuando el comandante de su columna lo descubrió y la trasladó a un frente en el que hacían abortos. "Ahí dio la orden que me pusieran la droga para el legrado. Como a las dos de la tarde me empezaron a poner la droga, al otro día como a las nueve de la mañana tuve el niño, era un varón, nació vivo. El médico lo mandó a botar vivo a la basura y yo lo trate mal porque me dio mucha rabia. Lo saqué de la basura y lo tuve en mis manos como media hora hasta que se murió en mis manos”, dijo la persona afectada.

El procurador Wolffhügel concluyó con su llamado que deben ampliarse los criterios de investigación en el macrocaso 07, "a fin de que se indaguen a profundidad los cuatro escenarios fácticos analizados, relacionados con el asesinato de neonatos".

Carlos López

En Twitter: @CarlosL49