En este portal utilizamos datos de navegación / cookies propias y de terceros para gestionar el portal, elaborar información estadística, optimizar la funcionalidad del sitio y mostrar publicidad relacionada con sus preferencias a través del análisis de la navegación. Si continúa navegando, usted estará aceptando esta utilización. Puede conocer cómo deshabilitarlas u obtener más información
aquí
Ya tienes una cuenta vinculada a EL TIEMPO, por favor inicia sesión con ella y no te pierdas de todos los beneficios que tenemos para tí. Iniciar sesión
¡Hola! Parece que has alcanzado tu límite diario de 3 búsquedas en nuestro chat bot como registrado.
¿Quieres seguir disfrutando de este y otros beneficios exclusivos?
Adquiere el plan de suscripción que se adapte a tus preferencias y accede a ¡contenido ilimitado! No te
pierdas la oportunidad de disfrutar todas las funcionalidades que ofrecemos. 🌟
¡Hola! Haz excedido el máximo de peticiones mensuales.
Para más información continua navegando en eltiempo.com
Error 505
Estamos resolviendo el problema, inténtalo nuevamente más tarde.
Procesando tu pregunta... ¡Un momento, por favor!
¿Sabías que registrándote en nuestro portal podrás acceder al chatbot de El Tiempo y obtener información
precisa en tus búsquedas?
Con el envío de tus consultas, aceptas los Términos y Condiciones del Chat disponibles en la parte superior. Recuerda que las respuestas generadas pueden presentar inexactitudes o bloqueos, de acuerdo con las políticas de filtros de contenido o el estado del modelo. Este Chat tiene finalidades únicamente informativas.
De acuerdo con las políticas de la IA que usa EL TIEMPO, no es posible responder a las preguntas relacionadas con los siguientes temas: odio, sexual, violencia y autolesiones
Exclusivo suscriptores
La historia del hallazgo de la prueba reina en condena por Palacio de Justicia
Video estaba en biblioteca del coronel Plazas Vega. Demuestra que dos desaparecidos salieron vivos.
Escenas de la toma realizada por la guerrilla del M-19 al
Palacio de Justicia el 6 de Noviembre de 1985 en Bogotá. Foto: Archivo. EL TIEMPO.
Un video que por años tuvo en su biblioteca el coronel Alfonso Plazas Vega —quien desde 1985 hasta su absolución, en 2015, fue la cara militar más reconocida de la investigación por los desaparecidos del Palacio de Justicia— terminó siendo clave en la ratificación definitiva de la condena contra otro comandante de la violenta retoma: el coronel Edilberto Sánchez Rubiano.
La Corte Suprema avaló la condena de 40 años impuesta por el Tribunal de Bogotá contra Sánchez, excomandante de Inteligencia de la Brigada 13 y quien, para la máxima instancia de la justicia colombiana, es responsable de la desaparición de Carlos Augusto Rodríguez, el de la cafetería del Palacio, y de Bernardo Beltrán.
Ellos fueron señalados por los militares como sospechosos de colaborar con el comando del M-19 que asaltó a sangre y fuego la edificación y que desencadenó la tragedia. Y después fueron conducidos a instalaciones castrenses, donde se perdió para siempre su rastro. Los dos, junto con la guerrillera del M-19 Irma Franco, siguen en la lista oficial de desaparecidos tras casi 38 años.
“En lo que atañe a los desaparecidos Rodríguez Vera y Beltrán Hernández, empleados de la cafetería del complejo judicial” —dice la sentencia— “solo ha de mencionarse que, a través de videos, familiares y conocidos percibieron su salida de las instalaciones del Palacio, custodiados por hombres del Ejército, sin otra opción, como se develó en precedencia, a la de seguir su camino hacia la Casa del Florero”.
Allí estaba el puesto de mando de Sánchez Rubiano y varios oficiales encargados de identificar y llevarse a los supuestos del M-19 que hubieran podido sobrevivir.
La Corte dictó palabra final sobre la credibilidad de dos polémicos testigos en el proceso: Édgar Villamizar y Ricardo Gámez, quienes aparecieron en la investigación años después y aseguraron haber sido testigos directos de torturas y las órdenes de desaparición contra Franco, Rodríguez y Beltrán.
Gámez entregó una declaración en la que decía que había sido miembro de Inteligencia del Ejército y que supo de primera mano que “por orden del coronel Plazas el de la cafetería del Palacio fue trasladado de la Casa del Florero a la Escuela de Caballería, lugar en el que se le sometió a torturas por un lapso de cuatro días”.
Y Villamizar apareció en el 2007 asegurando que había estado de guardia en la Escuela de Caballería y que escuchó las torturas contra Franco y Rodríguez. Después negó esa versión y finalmente se demostró que en la primera declaración había enormes vacíos. "Debe enfatizar la Sala las dudas acerca de la veracidad de las declaraciones vertidas por los testigos Édgar Villamizar Espinel y Ricardo Gámez Mazuera, a quienes no es posible darles credibilidad en sus exposiciones", dice la sentencia de la Corte.
Para determinar que Carlos Rodríguez y Bernardo Beltrán salieron vivos del Palacio y luego fueron desaparecidos, la Corte dio crédito al reconocimiento que de ellos hicieron familiares y amigos en algunos videos de la época, especialmente de la Televisión Española.
Las dudas de fondo que había sobre esos reconocimientos, en la medida en que se basaban en imágenes difusas, terminaron borrándose gracias al video que la Fiscalía se llevó de la casa de Plazas Vega en una diligencia de inspección ordenada en el 2009 por la entonces fiscal Ángela María Buitrago. El video estaba en la biblioteca del coronel y juntaba varias secuencias de medios de comunicación de la época que nunca habían llegado al expediente.
Con el video, un hermano, la viuda de Rodríguez y un amigo lo identificaron plenamente. Y en el caso de Bernardo Beltrán, dice la Corte, “su hermana Sandra, destacando características propias de su fisionomía, lo reconoció en el video encontrado en la vivienda del coronel”.
La defensa de Sánchez y otros militares cuestionaba que los familiares de Rodríguez, entre ellos su fallecido padre, inicialmente no lo habían podido reconocer tajantemente en otro video de la Televisión Española sobre la salida de los rehenes.
El hallado en la casa de Plazas Vega, y que paradójicamente él usaba en charlas y seminarios para defender la legitimidad de la operación, “contiene la misma información” de otros que ya estaban en el expediente, pero con grandes diferencias que lo acreditaban, según la Corte, como prueba reina: “Por haberse realizado desde un plano general, de frente hacia los evacuados y con mejor calidad digital”, sus imágenes sí podían dar lugar al pleno reconocimiento de los dos desaparecidos de la cafetería del Palacio.