La designación ha generado una serie de reacciones críticas entre líderes y activistas afrocolombianos, quienes argumentan que el cargo debería ser ocupado por una persona con una comprensión profunda de los problemas históricos y las demandas actuales de estas comunidades.
La solicitud, impulsada por ILEX Acción Jurídica, la Conferencia Nacional de Organizaciones Afrocolombianas (CNOA), el Observatorio de Discriminación Racial (ODR) y el Consejo Nacional de Paz Afrocolombiano (CONPA), busca esclarecer los criterios de esta designación, que consideran inconsistente con las necesidades de representación de dichas comunidades.
“La dirección es una conquista del pueblo negro y aunque los cargos públicos no tienen color étnico, en este caso se trata de una usurpación de una dependencia que debe trabajar por los derechos de nuestro pueblo. Tenemos profesionales lo suficientemente preparados para ocupar ese cargo,” comentó Richard Moreno, coordinador del Consejo Nacional de Paz Afrocolombiano, una de las organizaciones firmantes del derecho de petición.
Un nombramiento bajo cuestionamiento
El contexto de la designación de Cotes añade más controversia. Cotes había sido retirada previamente de la Dirección Nacional de Asuntos Religiosos, cargo que, según una sentencia judicial del 23 de octubre, debería habérsele restituido tras un fallo a su favor. Sin embargo, pocos días después de esta orden, el Ministerio decidió reasignarla a la dirección de Asuntos Étnicos en lugar de cumplir con el reintegro en su puesto original.
Para los líderes de las comunidades negras, esta decisión evidencia una desconexión del Ministerio del Interior con las luchas y necesidades de estos pueblos. Según explicaron, la representación legítima de los derechos de las comunidades afrocolombianas no solo implica ocupar cargos, sino que demanda experiencia y comprensión de las problemáticas que enfrentan.
“No tenemos nada en contra de las personas designadas; los responsables son quienes los designan,” indicó Moreno, agregando que más del 50% de los cargos que deberían estar ocupados por personas con conocimiento étnico son hoy ocupados por personas ajenas a estas comunidades.
Una dirección con demandas de representación legítima
La petición presentada busca que el Ministerio clarifique los criterios de esta designación y asuma un compromiso real con la representatividad. En palabras de Moreno, la reciente cumbre del pueblo negro celebrada en octubre de este año incluía el compromiso del ministro Juan Fernando Cristo de “fortalecer la gobernabilidad étnica y garantizar participación a nuestro pueblo”, un compromiso que, según los firmantes, está siendo contradicho por esta designación.
La solicitud destaca la importancia de contar con representantes que “encarnen, desde su experiencia y vivencia, la defensa de nuestros derechos”. Las organizaciones exigen que el Ministerio del Interior reconsidere esta decisión para no debilitar la participación activa de las comunidades negras en espacios públicos. “Nadie más sabe y puede defender nuestros derechos que nosotros mismos,” enfatizó Moreno.
La polémica sobre el nombramiento de Amelia Cotes en la Dirección de Asuntos Étnicos continúa. Los firmantes subrayan que, en este caso, no se trata de una simple asignación istrativa, sino de la representación de años de lucha y reivindicación de derechos para las comunidades afrocolombianas.
DEYNER CAICEDO CAMACHO
Redacción Política