
Noticia
Disminuir los índices de deserción escolar, una tarea inaplazable
La falta de educación formal puede limitar las oportunidades de desarrollo personal y profesional.
Hay que trabajar por una cultura educativa que inste a los jóvenes a encontrar su vocación y reconocer sus talentos. Foto: iStock.

Actualizado:
La educación es un aspecto esencial para el desarrollo de las sociedades, y en Colombia no es la excepción. Sin embargo, la deserción escolar es una realidad que ha ido en aumento en los últimos años. Aunque se han logrado avances significativos, la tendencia muestra que aún queda camino por recorrer en el país.
Según datos del Ministerio de Educación Nacional, unos de 470.000 niños, niñas y jóvenes abandonaron el sistema educativo entre finales de 2022 e inicios del 2023. Esto representa un aumento en comparación al periodo inmediatamente anterior: entre 2021 y 2022, el promedio de deserción estuvo en 330.000 estudiantes.
Las causas
Para Gloria Bernal, directora del Laboratorio de Economía de la Educación de la Universidad Javeriana, la falta de recursos económicos de las familias es uno de ellos, “lo que hace que algunos estudiantes dejen de ir a sus escuelas. En otros casos son enviados a trabajar para ayudar económicamente en su hogar, o bien, en especial las niñas, encargarse de trabajos domésticos o cuidados no remunerados”.
Cabe recordar que, en Colombia, 8 de cada 10 niñas entre los 10 y 17 años de edad se dedican a trabajo doméstico o cuidado no remunerado, de las cuales 1 de cada 10 no están estudiando, según datos del Departamento istrativo Nacional de Estadística (Dane).
Otro aspecto que puede incidir es la salud mental y emocional de los estudiantes, así como la falta de un entorno motivador y seguro en los colegios. Además las bajas habilidades lectoras en los estudiantes también inciden.
Las competencias de lectura son clave y base para otras áreas del conocimiento y son las universidades quienes deben recibir a los alumnos con sendos vacíos. “El bajo desempeño académico puede traducirse en reprobación o repitencia, lo que desmotiva a los estudiantes rezagados e impide que puedan avanzar en el sistema educativo”, asegura Bernal.
Para Benjamín Cepeda, director de Planeación y Gestión de la Calidad en la Fundación Universitaria para el Desarrollo Humano (Uninpahu), este fenómeno afecta de manera sustancial a los jóvenes, “en su desarrollo integral, bienestar y calidad de vida; toda vez que la finalidad de la educación es la construcción de un bien común para la sociedad e instaurar capacidades para ser agentes de transformación social, económica, ambiental y cultural”.
El país ha desarrollado lineamientos y otorgado disposiciones para mitigar la deserción, implementando programas y proyectos sectoriales para incentivar el a la educación. Foto Vanexa Romero/El Tiempo Foto:Vanexa Romero/ El Tiempo
de enfrentar dificultades en el futuro, como desempleo, ingresos más bajos y una menor calidad de vida. La falta de educación formal puede limitar las oportunidades de desarrollo personal y profesional”.
A su vez, Felipe Palacios, rector del Colegio Ciedi, dirige la atención hacia los adolescentes y preadolescentes que regresaron a la presencialidad. “Existe una gran afectación en su salud mental relacionada con los procesos de resocialización post pandemia. Por ejemplo, hay exceso del uso de la tecnología, por ende, baja calidad de sueño”, afirma.
Por otra parte, agrega, muy pocos colegios se están repensando los procesos de enseñanza y aprendizaje, pues muchas instituciones solo exigen resultados académicos, mientras que los estudiantes están buscando socializar y ser aceptados por sus pares. “Esto está generando quebrantos en la salud mental, por lo que muchos estudiantes presentan cuadros de ansiedad o depresión que no están siendo debidamente atendidos por el sistema educativo”, dice.
Estrategias de permanencia
Se debe trabajar en consolidar una cultura educativa y promover una transformación social, orientada al desarrollo cognitivo y la construcción de tejido social: Felipe Palacios, rector
Si bien, el país ha desarrollado algunos lineamientos y otorgado algunas disposiciones para mitigar dichos factores, implementando programas y proyectos sectoriales para incentivar el a la educación, el reto actual se encuentra en la cobertura, la calidad y la pertinencia de los programas educativos, para promover el desarrollo sostenible del país bajo un entorno globalizado, indica Cepeda, de Uninpahu.
Así mismo, Palacios puntualiza que se debe trabajar en consolidar “una cultura educativa y promover una transformación social, orientada al desarrollo cognitivo y la construcción de tejido social, mediante el cual, se incentive la formación para el trabajo que permita apalancar el crecimiento empresarial y facilitar la empleabilidad de las personas; lo cual implica una formación continua y la articulación del sistema en sus diferentes niveles”.
REDACCIÓN MÁS CONTENIDO
Sigue toda la información de Más Contenido en Facebook y X, o en nuestra newsletter semanal.
Conforme a los criterios de



EL TIEMPO GOOGLE NEWS
Síguenos en GOOGLE NEWS. Mantente siempre actualizado con las últimas noticias coberturas historias y análisis directamente en Google News.

EL TIEMPO WHATSAPP
Únete al canal de El Tiempo en WhatsApp para estar al día con las noticias más relevantes al momento.

EL TIEMPO APP
Mantente informado con la app de EL TIEMPO. Recibe las últimas noticias coberturas historias y análisis directamente en tu dispositivo.

SUSCRÍBETE AL DIGITAL
Información confiable para ti. Suscríbete a EL TIEMPO y consulta de forma ilimitada nuestros contenidos periodísticos.