Se fortalecen proyectos de agro sostenible

De acuerdo con el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, para ser sostenibles –además de realizar prácticas de producción amigables con el medioambiente, en términos de preparación de suelos, uso eficiente de fertilizantes y de agua, aplicación de tecnologías de agricultura digital, etcétera–, se debe garantizar que los productos se obtienen de tierras que se encuentren al interior de la ‘frontera agrícola’ definida por esa cartera. 

En este sentido, la entidad abordará en el Tolima lo referente a sistemas productivos de arroz, café y maíz.

“Este departamento hace parte de la cobertura de las mesas técnicas agroclimáticas y, con su implementación, se han realizado espacios de capacitación sobre alfabetización agroclimática, herramientas para monitoreo de sequía agrícola, instrumentos para difusión de información agroclimática (podcasts), el sistema de evaluación de daños y pérdidas agropecuarias, y oportunidades financieras y no financieras para la adaptación al cambio climático”, explican voceros del Minagricultura.

De forma preliminar, también informan que se van a adelantar programas como el de fortalecimiento de la productividad de plantaciones de cacao, a través de la evaluación del comportamiento epidemiológico de las enfermedades de interés fitosanitario, con el objetivo de aunar esfuerzos técnicos, istrativos, científicos y financieros para evaluar el comportamiento epidemiológico en plantaciones improductivas del producto ubicadas en las zonas cacaoteras del país, orientadas al mejoramiento de la productividad mediante la técnica de renovación de cultivos.

Con esto se espera beneficiar a unos 250 productores del Tolima, gracias a la inversión de $740’740.740, destinada para ese departamento. 

A ese se suma el programa ‘Agrocadenas’, en cooperación con el Gobierno Italiano, con el fin de fortalecer esas cadenas productivas colombianas de cacao, café, mango, aguacate, pasifloras, desde el punto de vista técnico, asociativo y de gestión, impulsando la colaboración entre el sector público y el privado. Se busca beneficiar a 19 asociaciones para el Tolima.

Desde la Gobernación del Tolima, a través de la Secretaría de Desarrollo Agropecuario, se vienen impulsando tres proyectos ejemplares en lo que hace referencia al modelo agrosostenible, con lo que se ha venido aplicando la implementación de tecnologías que aumentan la eficiencia productiva y minimizan el impacto ambiental.

Se trata de ‘Ganadería sostenible’, cuyo objetivo es implementar modelos productivos sostenibles, incorporando alternativas tecnológicas a través de asistencia técnica y suministro de elementos para desarrollar el sector ganadero bovino en el Tolima. Según la entidad, llega a 550 ganaderos de 22 municipios del departamento, teniendo un impacto en la entrega de insumos y materiales requeridos para establecimiento de bancos de proteína y semilla.

Lo anterior involucra la realización de análisis de suelos, instalación de cercas eléctricas, entrega de bioabono y postes plásticos, sincronización de hembras y transferencia de embriones, y la entrega y establecimiento de plántulas de arbóreas forrajeras.

El segundo es el ‘Proyecto InnovaCafé’ (implementación de innovaciones tecnológicas en los procesos de poscosecha para mejorar la calidad y sostenibilidad del café), en donde 20 municipios del Tolima son beneficiarios, a quienes se les entrega semi integrados, tanques tina, kits de marquesinas y kits de buenas prácticas - 7P.

“El alcance de este proyecto es entregar 900 kits de innovaciones tecnológicas, 800  registros de visitas a fincas que contengan las socializaciones de los resultados, 1.800 análisis físicos y sensoriales de café con recomendaciones, micro centrales con la implementación de un nuevo modelo de comercialización de café y más de 930 caficultores beneficiados. Este programa tiene un componente de innovación sostenible, ya que contiene filtros verdes para el manejo de aguas mieles del café e implementación de procesadoras de pulpa para la correcta disposición de los subproductos de esta cadena productiva”, señalan las fuentes de la Gobernación.

Y el tercer proyecto es el de ‘Cafés varietales de Ataco’, que se convierte en una oportunidad única para los beneficiarios de establecer desde el inicio un lote productivo de cafés varietales, lo que determina el inicio de una unidad productiva rentable a futuro y sostenible para los que la reciben.

Así mismo, ellos tendrán procesos de educación en los tratamientos de cosecha y poscosecha de este tipo de cafés, lo que permitiría el cambio de los modelos tradicionales dentro de las unidades productivas y que desarrollen capacidades que pueden ser aplicadas en cualquier otra unidad productiva.

“Son 40 jóvenes beneficiarios de este proyecto en los que se les hace un curso de capacitación en transferencia de conocimiento en cafés varietales, barismo, catación, procesos asociativos, comercialización, turismo y agronegocios”, precisan los portavoces.

De otro lado, la Cámara de Comercio de Ibagué revela que, desde el año 2019, se enfocó en procesos de fortalecimiento para el sector cacaocultor, que empezó a jalonar recursos que han permitido desde caracterizar cultivos y productores, hasta contar hoy con una planta de transformación de cacao en el departamento.

“A través de las intervenciones que se han hecho en las fincas donde se cultiva este producto, se ha ratificado la baja presencia de cio que tiene el cacao del Tolima, característica que le da mayor valor agregado en el mercado internacional,  especialmente en el europeo. Adicionalmente, hasta donde han llegado equipos interdisciplinarios, se han fortalecido unidades productivas, sofisticado y hecho adecuación de la oferta, desarrollado buenas prácticas agrícolas y se han certificado predios con sellos de sostenibilidad como el ‘Rainforest’”, anotan los voceros.

Así, bajo el liderazgo de la Cámara de Comercio de Ibagué, se han invertido  $4.746’980.000 provenientes de entidades aliadas y cooperación internacional, lo que ha permitido beneficiar a 1.780 pequeños productores de manera directa y 4.000 personas de manera indirecta, en municipios como Ibagué, Rovira, Ataco, Ortega, Chaparral, Rioblanco, San Antonio, Planadas, Mariquita, Fresno, Líbano, Palocabildo, Falan, Armero Guayabal y Alvarado.

Esos recursos han hecho posible que el departamento cuente con una planta de transformación de cacao, donde actualmente se hace acopio y comercialización; de esta última tarea se encarga la Cooperativa Riqueza Ancestral, trabajo asociativo que surgió como resultado de la ejecución de proyectos en la región.

También se tiene un laboratorio de análisis sensorial que permite definir los atributos del cacao y se logró la construcción y dotación de siete centros de beneficio colectivo donde se realizan procesos de secado, fermentación y homogenización.

"Desde el 2022 se viene ejecutando el proyecto ‘C+C Cacaos especiales para el Tolima’, que hace parte del programa cadenas de valor más sostenibles e inclusivas, el con el cual se dará continuidad a la caracterización de predios, a la entrega de dotación e insumos, además se buscará la certificación ‘Con manos de mujer’ de los predios de las cacaocultoras que hacen parte de las asociaciones seleccionadas del departamento", enfatizan las fuentes de la Cámara.

La Federación Nacional de Arroceros (Fedearroz), ha logrado un acompañamiento técnico con ciencia y tecnología en cada una de las zonas arroceras de Colombia, siendo el programa de Adopción Masiva de Tecnología (Amtec), el líder. En particular, los avances generados en los temas de sostenibilidad en el Tolima buscan trazar un camino hacia la formación y aprendizaje de una agricultura sostenible que dé respuesta a las exigencias de los mercados, reduzca las emisiones de gases contaminantes, disminuya en tiempo y lámina de riego y conciencie a la población a una alimentación inocua que favorezca la salud pública y contribuya al cuidado del ambiente.

Por esta razón, el programa Amtec es el primer eslabón para acceder a la certificación en Buenas Prácticas Agrícolas (BPA), mediante un exigente proceso de aprendizaje que permite la optimización de los recursos con los que cuenta la finca, entre ellos los naturales, la trazabilidad de las técnicas a través de los registros y la capacitación permanente del personal asociado. 

Hoy, Fedearroz, en compañía con el Instituto Colombiano Agropecuario (ICA), ha logrado la certificación de ocho fincas en el Tolima y 11 se encuentran en proceso de certificación. En el Centro Experimental “Las Lagunas”, ubicado en el municipio de Saldaña, se generan proyectos que evalúan las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), obteniendo una disminución de hasta el 68 por ciento de metano, cuando se emplean prácticas como AWD (riego intermitente); además se promueve la eficiencia bajo el sistema de riego en arroz por múltiples entradas Miri, donde se ahorra hasta un 33 por ciento en el uso de agua y el tiempo adicional, en un 42 por ciento, obtenido por implementar Amtec mediante las prácticas de adecuación de suelos.

Los agricultores que han participado en el programa Amtec reportan una diferencia gracias a la disminución en un 23 por ciento en aplicación de agroquímicos y el uso de productos biológicos posicionados como alternativa dentro de los productores

arroceros. El uso de fertilizantes se ha optimizado en un 37 por ciento, basado en un buen diagnóstico y análisis químico, que permiten un plan de fertilización acorde a las necesidades de la variedad y los aportes del suelo, lo cual se apoya con el uso de la herramienta Sisa web, disponible de manera gratuita en la página web de la federación.

Otra de las prácticas del programa Amtec, desarrollado e impulsado por Fedearroz - Fondo Nacional del Arroz, es la rotación de cultivos o cultivos de servicios, que promueve el rompimiento estacional de plagas y enfermedades para la siembra del arroz. Aporta una disminución en el costo de herbicidas de hasta un 40 por ciento gracias a la rotación de moléculas de un semestre a otro y, además, genera una mejora en la estructura física, química y biológica del suelo. En la actualidad, se maneja un proyecto entre Fedearroz y el Fondo Latinoamericano de Arroz Riego (Flar), que busca incentivar la práctica de rotación con el cultivo de soya y conocer sus beneficios para el grano.