La reconocida presentadora de televisión de
HGTV, Jasmine Roth, quien
afronta su segundo embarazo a sus cuarenta años de edad, reveló en una entrevista los
puntos positivos de convertirse en madre por primera vez a los treinta y seis años al provenir de una familia en la que
las generaciones sólo tenían veinte años de diferencia.
Las tradiciones de una familia son en ocasiones un juramento inquebrantable que los descendientes repiten con orgullo, aunque también existe lugar para el cambio en nuevas generaciones. Ese es el caso de Roth, quien proviene de una familia en la que las mujeres concebían a temprana edad, por lo que su abuela sólo le sacaba cuarenta años de diferencia.
En el año 2024, a la misma edad que tenía su abuela cuando ella nació, Roth está embarazada de su segundo hijo, y aseguró que romper con la tradición fue una de sus mejores decisiones. "Podíamos hacer muchas actividades divertidas, pero también había desafíos: preocupaciones financieras e inmadurez emocional", explicó sobre la situación que enfrentaba su familia en una entrevista publicada por Business Insider.
Luego, Roth relató que conoció a su esposo a los veinte años de edad y decidieron mudarse juntos. Desde entonces, los proyectos para asegurar su estabilidad financiera pasaron al primer plano en su vida,
dejando el deseo de tener un hijo para el futuro.
Al cumplir su objetivo financiero, a los treinta y seis años de edad, la presentadora de televisión se convirtió en madre por primera vez. "Unos tres años antes llegamos a un punto en el que éramos felices con nuestras carreras. Éramos dueños de una casa y teníamos un nivel de éxito profesional y financiero con el que nos sentíamos cómodos", aseguró.
El momento perfecto para ser madre
La presentadora de televisión reconoció que, pese a que desde el primer momento tomaron una decisión que se habían prometido cumplir, las dudas sobre si su decisión era la correcta no faltaron. "Aun así, tenía la confianza de saber que era la elección correcta para nosotros", sentenció.
No obstante, al momento en el que decidieron tener su primer hijo, la pandemia de Covid-19 apareció para complicar sus planes, y debido a la cuarentena, incluso las consultas médicas se convirtieron en un desafío. "Cuando estaba en trabajo de parto, empacamos una hielera con comida, porque sabíamos que si mi esposo salía del hospital tal vez no podría regresar. Después, pasamos por la casa de mi madre y le mostramos a su nuevo nieto a través de la ventanilla del auto", relató.
Al concebir a su primer hijo en medio de un escenario traumático, volver a quedar embarazada le llevó tiempo a Roth, pero rendirse no era una opción. "Pasamos un año más intentando tener otro hijo. Tuve que abordar problemas de salud que no sabía que tenía, como el colesterol alto. Concebimos después de una inseminación intrauterina (IIU)", completó.