Editorial

'Renuncié a mi trabajo de seis cifras porque no me respetaban; no me arrepiento'

Entendió que el éxito profesional va más allá del dinero.

Eleni Trapp compartió su historia de vida. Foto: Instagram @xtrappqueenx

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Ariadna Cruz

REDACTORA02.08.2024 18:16 Actualizado: 05.08.2024 12:34

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Cuando a Eleni Trapp le ofrecieron un trabajo como diseñador de UX para un gran casino con un sueldo de US$150.000, pensó que había alcanzado el éxito profesional. Sin embargo, pronto se dio cuenta de que en realidad no era lo que estaba buscando.

La diseñadora brindó una entrevista al medio Business Insider en la que compartió que a pesar de la posición que había conseguido y de su salario, se decepcionó al descubrir que si quería permanecer en ese trabajo debía cumplir con las prácticas comerciales antiguas.

Básicamente su labor era apoyar el desarrollo de una aplicación para llevar a cabo apuestas deportivas online. El proyecto consistía en pasar de las transacciones tradicionales a las digitales.

No obstante, cada vez que le presentaba ideas de diseño a su equipo, a pesar de que recibía grandes elogios de sus colegas, la burocracia y la resistencia a los cambios la detenían.

Y es que el equipo ejecutivo estaba compuesto principalmente por hombres mayores que no entendían lo que se necesita en la era digital y no estaban dispuestos a invertir en ello, por lo que había escasez de personal y recursos.

Eleni Trapp dijo que constantemente sentía que sus ideas eran ignoradas y que tenía que apoyar la jerarquía tradicional, por lo que, sin importar qué tanto quisiera llevar adelante su proyecto, tuvo que conformarse con la creación de una plataforma anticuada y básica que no llevaba los elementos de innovación que habían prometido.

Sintió que su posición como la persona más joven en el equipo, y siendo mujer, le impedían encontrar su lugar en la compañía pues nadie con influencia la apoyaba.

Y cuando, al lado de un compañero, decidió ir con uno de los directivos para explicarle que no estaban yendo por el camino correcto, la respuesta fue una advertencia de que no pusieran en peligro de lanzamiento del producto. Lo peor fue que, después, su compañero recibió una disculpa, pero para ella nunca llegó.

A partir de entonces únicamente se quedó en la compañía para poder saldar sus deudas y financiar su título de posgrado, pero dejó de dar su opinión a menos que se la pidieran y comenzó a recibir comentarios negativos sobre su desempeño.

La gota que derramó el vaso fue que, cuando pidió una posición que le correspondía e incluía un incremento salarial, se lo negaron.

Ahora que trabaja de manera independiente es más feliz. Foto:Instagram @xtrappqueenx

De trabajar para un enorme casino a ser freelance en busca de su felicidad

Cuando Eleni Trapp se dio cuenta de que no le iba a ser posible ascender en la empresa en la que estaba a menos que sacrificara su identidad y dejará de dar su sincera opinión comenzó a ahorrar dinero para poder mantenerse sin una fuente constante de ingresos.

Aunque buscó empleos en otras compañías, recibió un mensaje de un conocido de la universidad preguntándole si quería hacer un trabajo de diseño para su empresa y se dio cuenta que, de manera independiente, podía poner en práctica su experiencia, así que decidió arriesgarse a trabajar como freelance.

Señaló que uno de los retos que enfrentó fue establecer el valor de sus servicios pero, a través de búsquedas en Google y considerando su salario por hora, pudo hacer un cálculo y hoy cobra US$65 dólares la hora. "Todavía me parece extraño cobrar a la gente por mis servicios, pero tengo que recordarme que soy una persona capacitada y que merezco una remuneración justa", dijo Eleni.

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