El programa de 'amnistía masiva' a inmigrantes que ejecuta silenciosamente Joe Biden

En medio del aparente endurecimiento de las medidas en las fronteras que llevó a reducir la inmigración ilegal en más del cincuenta porciento en mayo en comparación con las estadísticas de diciembre, el presidente Biden lleva a cabo un proceso silencioso de "amnistía" hacia determinados inmigrantes, a quienes no les concede el asilo, pero tampoco se lo niega.

Desde el año 2022 hasta la actualidad, según la información revelada por el medio The New York Post, la istración Biden cerró más de 350.000 casos de asilo presentados por inmigrantes que no poseían antecedentes penales o no representaban un riesgo para el país.

De este modo, el gobierno considera cerrados sus casos "sin una decisión sobre los méritos de su solicitud de asilo", por lo que ya no poseen la obligación de presentarse ante las autoridades y pueden deambular indefinidamente y de manera legal por el territorio estadounidense sin ser perseguidos.
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Dos años después del fin de las políticas restrictivas implementadas durante la gestión de Donald Trump, el cambio drástico llevó al asesor legal del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés), Kerry Doyle, a emitir un memorándum en el que instaba a los fiscales a desestimar los casos de inmigrantes que no representaban un peligro para la sociedad estadounidense.

En ese sentido, desde la asunción de Biden, el gobierno estadounidense le entregó la aprobación de su solicitud de asilo al 67 porciento de los solicitantes. En el 2024, la istración concedió asilo a 32.000 personas, ordenó la expulsión de 36.000 y desestimó los casos de 102.550.
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Aunque en primer lugar la medida termina con los interminables procesos burocráticos y ofrece diversas facilidades para el sistema judicial, la decisión implementada silenciosamente por el gobierno de Biden despertó críticas. 

"Esto es simplemente una amnistía masiva disfrazada de discreción procesal. Básicamente, estás permitiendo que personas que no tienen derecho a estar en Estados Unidos estén aquí indefinidamente", expresó Andrew Arthur, ex juez de inmigración que trabaja para el Centro de Estudios de Inmigración, en diálogo con el medio anteriormente mencionado.

En esa línea, un oficial del ICE que pidió mantener el anonimato pidió al medio que "todos sepan lo que realmente está pasando", en un claro mensaje de reclamo a la política actualmente implementada. No obstante, otro funcionario del ICE explicó: "Si los migrantes, a quienes el organismo ya no controla ni monitorea, cometen delitos después del despido, ICE tendrá que empezar de nuevo y emitir un nuevo Aviso para comparecer ante el tribunal y empezar el cronómetro de nuevo".