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Los apellidos latinos que nacieron en un orfanato y ahora son muy comunes
Expósito es uno de los apellidos cuyo origen es rastreable hasta los orfanatos españoles.
Algunos de los apellidos latinos nacieron en España. Foto: iStock
Los apellidos comenzaron a emplearse como una forma de identificar a la gente y sus pertenencias. Algunos provienen de los nombres de las personas o indican parentesco, otros señalan profesiones u oficios, y también hay los que describen algunas características físicas. Pero no solo aquellos que tenían claro a qué familia pertenecían, necesitaban una identidad, en la España de la edad media, los niños huérfanos comenzaron a recibir apellidos que, hoy en día, son muy populares, como Expósito o Iglesias.
Y como México, por ejemplo, fue colonizado por España, no es de sorprender que algunos de esos distintivos del continente europeo ahora sean de los más populares en las tierras latinoamericanas.
Entonces, el contexto es que para identificar a los niños sin familia que habitaban los orfanatos, las personas responsables de las instituciones los dotaron de apellidos que, de cierta forma, revelaban su origen. Uno de los más populares es Expósito, que, según el Instituto Nacional de Estadísticas de España, a la fecha es usado por 34.333 personas como primer apellido y por 37.563, como segundo.
Expósito tiene su origen en el término latino “expositus”, que significa “expuesto”. De hecho, el Diccionario de la Real Academia española, lo define como: “Dicho de un recién nacido: abandonado o expuesto, o confiado a un establecimiento benéfico”. Este apellido tiene tal carga emocional, que a partir de 1921 las leyes de España facilitan su cambio a las personas que lo llevan, según indica el portal 65 y más.
Los apellidos nacidos en los orfanatos españoles que siguen en uso en la actualidad
Otros apellidos que surgieron en orfanatos y que comúnmente eran utilizados en lugar de Expósito, son Tirado, Incógnito o Blanco, según identifica El Español. Estos nombres identificaban a los niños abandonados o a quienes habían perdido a sus padres sin poder identificar su procedencia.
Los apellidos forman parte de la identidad legal de las personas y aparecen en el certificado de nacimiento. Foto:iStock
También se destaca que, algunos de estos apellidos empleados para identificar a los bebés sin familia, se inspiraban en el entorno eclesiástico y religioso, ya que muchos orfanatos dependían o estaban istrados por instituciones de fe. Nombres como De la Iglesia, San Juan, De Dios Cruz, Iglesias, De María o Diosdado, han llegado a nuestros días y siguen en uso en los países latinos.
Otra vertiente de apellidos latinos surgidos en orfanatos son aquellos que indican la ciudad en la que fue hallado o criado el menor. Por ello es común conocer personas denominadas como Bilbao, Salamanca, Madrid o España. De esta forma, los huérfanos podían saber su origen.