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Editorial
Los cuerpos de cientos de migrantes permanecen en la morgue: ¿qué pasa con ellos?
Las familias se enfrenta no solo a la tristeza sino a impotencia debido a los trámites burocráticos.
La frontera entre México y EE. UU. representa diversos riesgos. Foto: iStock
Cruzar la frontera hacia Estados Unidos en busca del sueño americano puede convertirse en una verdadera pesadilla para los migrantes que se enfrentan a múltiples riesgos, desde los peligros ambientales hasta la delincuencia organizada. Desafortunadamente, muchos no logran su cometido y pierden la vida. ¿Qué sucede en esos casos?
Una investigación de Telemundo denunció que los restos de al menos 1.500 inmigrantes indocumentados se encuentran en morgues a lo largo de la frontera, esperando ser identificados para poder regresar a casa.
El medio documentó la situación que se vive en San Marcos, en Texas, entre Austin y San Antonio, en donde muchos cuerpos son encontrados. Inicialmente únicamente son identificados con un número. Posteriormente los responsables de analizar los restos buscan alguna pista que ayude a identificarlos.
Mientras no se averigüe su identidad, sus restos y pertenencias son puestos en una bolsa de papel y se guardan en una habitación llena de cajas de cartón dentro del laboratorio de Operación Identificación, un proyecto del Centro de Antropología Forense de la Universidad Estatal de Texas que, desde 2013, ha exhumado o recibido 535 restos humanos hallados cerca de la frontera con México.
Según información compartida por el Centro, en poco más de una década, han logrado identificar a 140 indocumentados. De ellos, los restos de 99 ya fueron repatriados y 41 más esperan poder ser devueltos a su país.
Miles de cuerpos esperan a ser identificados. Foto:iStock
La burocracia es un problema para las familias de migrantes muertos en la frontera
En Estados Unidos no existe una ley federal que determine cómo gestionar los cuerpos de personas que mueren en la frontera, por lo que se sigue todo un proceso para poder identificarlos y repatriarlos, mismo que varían de estado a estado.
La situación no es fácil, en ocasiones el proceso puede tardar meses o años y en muchos casos las personas nunca llegan a ser identificadas.
De hecho, cifras de Naciones Unidas indican que entre 2014 y 2024, 4.208 migrantes han muerto en la frontera, aunque estiman que la cifra podría ser mayor debido a que muchos cuerpos nunca llegan a ser encontrados ya que se pierden en el desierto o en el fondo del mar.
En muchos casos la única esperanza que tienen las familias es enviar una muestra de ADN con la intención de que sea comparada con los restos que están resguardados y poder encontrar una coincidencia.
Pero en otros ya no hay nada que hacer, hay restos que simplemente fueron cremados, debido al tiempo que permanecieron sin ser identificados.
Si perdió o con algún familiar que intentaba llegar a Estados Unidos y teme lo peor, puede comunicarse a los consulados, hasta donde se manda toda la información disponible de identificación, como el ADN, fotos de los restos y de la ropa.