El expresidente de Cataluña
Carles Puigdemont llegó a un acuerdo con ERC, uno de los partidos independentistas del Parlamento regional, para tratar de ser investido de nuevo jefe del gobierno catalán.El acuerdo se logró en la noche de este martes en una reunión celebrada entre Marta Rovira, dirigente de ERC (izquierda republicana), y el propio Puigdemont, en nombre de la coalición Junts per Catalunya (JxCat), informaron hoy fuentes de ambas formaciones soberanistas.
El encuentro se produjo en Bruselas, lugar desde donde Puigdemont huye de la Justicia española, que lo investiga por rebelión y delitos relacionados con el proceso independentista catalán.
Por este motivo, estas fuerzas políticas estudiarán la posibilidad de investirlo a distancia, de forma delegada o "telemática" si no está presente, algo a lo que se oponen los partidos que defienden la unidad de España.
La intención de Puigdemont es regresar a España -donde le espera una orden de detención- una vez ya haya sido investido. El acuerdo también es para formar una mayoría de diputados independentistas en la Mesa (órgano de dirección) del próximo Parlamento regional, que se constituirá el 17 de enero, tras las elecciones regionales del 21 de diciembre.
JxCat plantea una investidura "telemática", que se podría hacer vía Skype, o bien delegar en otro diputado presente en el pleno la lectura del discurso de Puigdemont como candidato a presidente regional de Cataluña.
En este contexto, fuentes de ERC indicaron a Efe que estudiarán con sus servicios jurídicos la viabilidad de estas propuestas. Mientras tanto, el exvicepresidente catalán y líder de ERC, Oriol Junqueras, y el exconsejero regional de Interior, también diputados electos, permanecen en prisión preventiva sin fianza en España en la causa judicial que investiga a todo el anterior gobierno independentista catalán.
Puigdemont y Junqueras habían concurrido en coalición en los anteriores comicios catalanes (septiembre de 2015), y gobernaron juntos hasta ser destituidos por el Ejecutivo español el 27 de octubre pasado.
Otros de ese gobierno están en libertad condicional en España o huidos también en Bélgica, y la mayoría de ellos resultaron elegidos parlamentarios en los comicios de diciembre.
La incógnita es cómo se garantizaría que los diputados electos que permanezcan en Bruselas o en prisión puedan votar en las sesiones parlamentarias. En todo caso, queda descartada la opción de que la mayoría independentista bloquee la constitución del Parlamento no asistiendo a la sesión.
El Ejecutivo español, amparado en la Constitución, destituyó a todo el gobierno catalán justo después de que el Parlamento regional aprobase por mayoría una declaración a favor de la secesión unilateral. Entonces, el presidente del Gobierno español,
Mariano Rajoy, convocó elecciones autonómicas, ganadas en minoría por los liberales de Ciudadanos (36 escaños), contrarios a la independencia.
EFE