¿Quién es quién en los cargos claves que se renovarán en la UE?

Los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Eropea nombraron este martes presidenta de la Comisión Europea  (CE) a la ministra de Defensa alemana, la conservadora Ursula von der Leyen, mientras que para la presidencia del Consejo Europeo escogieron al primer ministro belga, el liberal Charles Michel.

Para liderar el Banco Central Europeo optaron por la directora gerente del Fondo Monetario Internacional, Christine Lagarde, y para el puesto de alto representante de la Unión para Asuntos Exteriores (el jefe de la diplomacia), por el ministro español de Asuntos Exteriores en funciones, el socialista Josep Borrell.

Por último, este miércoles fue definida la pieza que faltaba, la presidencia de la Eurocámara que fue asignada al socialdemócrata italiano David Sassoli.

A la presidencia de la Comisión llega la alemana Ursula von der Leyen, de 60 años. Logró el visto bueno de los líderes europeos después de largas y tensas negociaciones. Será la primera mujer en la historia que asuma este cargo.

Von der Leyen ha estado al frente del ministerio de Defensa alemán desde 2013 y es  vicepresidenta de la Unión Cristiademócrata (CDU) que lidera la canciller Ángela Merkel, quien en cierto momento se la señaló como potencial heredera.

Es cercana al presidente francés Emmanuel Macron, particularmente por la buena cooperación en temas de defensa francoalemana. El presidente fue quien la nominó a la presidencia de la CE,  una jugada que le permitió obtener el BCE para Lagarde.

En la presidencia del Banco Central Europeo (BCE) estará la sa Christine Lagarde, de 63 años.

Esta abogada, reconvertida a banquera, ya ha alcanzado las cotas más altas: primera mujer ministra de Finanzas en Francia y primera en liderar durante cinco años el Fondo Monetario Internacional (FMI), así como la primera en dirigir una gran firma de abogados estadounidense.

Lagarde tiene experiencia en política monetaria incluso aunque nunca dirigió un banco central y no es economista. Su segundo mandato en el FMI coincidió con el ascenso del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y una ola de confrontaciones entre las principales economías sobre el comercio, que ella

describió como la principal amenaza para la economía mundial.

Lagarde ha reconocido también las tensiones causadas por la globalización, que ha afectado a las industrias y ha marginado a algunos trabajadores.

En la presidencia del Consejo Europeo se sentará Charles Michel, actual primer ministro belga, de 43 años. Un liberal que ha escalado rápidamente tras un nombramiento político tempranero, a la sombra de su padre, el excomisario europeo, Louis Michel.

Desde hace cinco años gobierna en coalición con el N-VA (nacionalistas flamencos), un partido que aboga por la independencia de Flandes desde sus propios estatutos.

En el puesto al frente de la diplomacia europea estará el español Josep Borrell, de 72 años. 

Borrell vuelve al primer plano de la escena europea donde ya tuvo un renacer político hace 15 años después de haber visto frustrado su deseo de gobernar España. Esta nominación en Bruselas en una consagración para este catalán fervientemente antiindependentista, nombrado hace un año ministro de Exteriores en el gobierno del socialista Pedro Sánchez tras un largo alejamiento de la política.

Poco adepto al lenguaje diplomático -acusó a la istración de Donald Trump

de comportarse como el "cowboy del Oeste" frente a Venezuela-, también puede mostrarse irritable, como cuando interrumpió furioso una entrevista donde fue interrogado sobre la actuación de la justicia española en el caso catalán.

Ubicándose en el ala más izquierdista del PSOE, en 1998 fue designado candidato socialista a la presidencia del gobierno para las elecciones del año 2000. Su ascenso duró poco, porque en mayo de 1999 tuvo que renunciar, salpicado por un escándalo

de fraude fiscal protagonizado por dos colaboradores suyos de la época en que era secretario de Estado de Hacienda, cargo al que fue nombrado en 1984 durante el gobierno socialista de Felipe González.

Frustrado en su ambición de gobernar España, Borrell, un aficionado al montañismo que se define como "un corredor de fondo", se recicló en la política europea. Fue cabeza de lista del PSOE en las elecciones europeas de 2004, año en que se convirtió en presidente del Parlamento Europeo, hasta 2007.

La presidencia del Parlamento Europeo quedó en manos de el socialdemócrata italiano David Sassoli, de 63 años, tras dos votaciones dentro de la misma institución. 

Sassoli comenzó su carrera como periodista en la década de los 80 y desde 2009 es eurodiputado, posicionándose en 2014 como vicepresidente de la cámara. El italiano celebró su victoria (con 345 votos sobre la alemana ecologista Ska Keller) por medio de su cuenta de Twitter y aclamó su postulación con "confianza y coraje".

Representante del segundo mayor grupo político en la eurocámara, nacido el 30 de mayo de 1956 en Florencia, Sassoli es conocido por ser una persona sobria y ecuánime, estudió Ciencias Políticas y comenzó su carrera de periodista como colaborador de pequeños periódicos y agencias de prensa en su ciudad.

En las elecciones europeas de 2009, se presentó como candidato del Partido Democrático italiano en uno de los cinco distritos electorales de Italia y salió elegido con más de 400.000 votos. Este éxito lo alejó de las pantallas de televisión y lo obligó a concentrarse en su carrera política dentro el Parlamento Europeo.

AFP y EFE