SEÑOR DIRECTOR:
Muy interesante el discurso del Presidente de la República en la instalación del Congreso. Sin embargo, estoy sorprendido por los datos sobre los turistas extranjeros que han visitado a Colombia. Tengo algunos pequeños intereses en suites hoteleras en Bogotá, Medellín, Cali, Cartagena y Barranquilla pertenecientes a tres importantes cadenas hoteleras. Los rendimientos de estas han sido extremadamente bajos durante el último año, por lo tanto me gustaría saber adonde han ido los millones de turistas que menciona el Presidente en su discurso. Él inclusive afirma que el sector del turismo ya desplazó al sector de minero y petrolero.
Al respecto, Cotelco alertó por la baja ocupación hotelera entre enero y mayo del 2024. La ocupación nacional se ubicó en un 48,9 %, cifra 3,2 % menor que la cifra registrada hace un año. En el Sector Caribe la ocupación hotelera fue un 1,1 % inferior a la del 2023. ¿A dónde fueron los millones de turistas a los que se refiere el Presidente?
Orlando Forero Esguerra
SEÑOR DIRECTOR:
Viendo toda esta vorágine de acontecimientos dentro del Senado y Cámara se pregunta uno qué es lo que pasa en Colombia. Estos dos recintos, que son donde se rigen las leyes de una nación, se convirtieron en unos casinos donde se maneja toda clase de intercambios para acomodar los intereses del Gobierno. Los senadores y representantes son hoy en día corredores de bolsa. Y nadie se pregunta por qué están ocurriendo todas estas patrañas. La vaina es que como el dinerito usado en estos menesteres no sale del bolsillo del Gobierno sino de los impuestos pagados por los contribuyentes... lo que no nos cuesta, hagámoslo fiesta.
Alfonso Solano B.
SEÑOR DIRECTOR:
La llegada del Presidente Petro, con más de dos horas de atraso y vistiendo un traje más apropiado para el carnaval de Barranquilla que para el evento oficial con el que nuestras Fuerzas Militares celebraban un aniversario más de nuestra Independencia, mostró un total desinterés del presidente por el desfile militar que cada año se lleva a cabo para celebrar nuestra Fiesta Patria y, en consecuencia, a nuestas Fuerzas Armadas. A este desfile todos los presidentes anteriores asistían puntualmente con el mayor respeto y vestidos apropiadamente, como primera autoridad de la Nación. Petro, en cambio, les manda un mal mensaje a nuestros soldados y policías, que con abnegación y sacrificio ensayaron con varios días de anticipación para homenajear apropiadamente a nuestras instituciones y autoridades en la celebración de nuestro grito de independencia.
Alfonso Gutiérrez
SEÑOR DIRECTOR:
¡La ciudadanía estupefacta ve cómo se roban los recursos y no pasa nada! Por lo menos los carrotanques existen, a pesar de estarse oxidando. ¿Qué pasó con la adición presupuestal de 700.000 millones, que giró Bonilla? Sabemos qué hay contratos fantasmas por 92.000 millones, en tres municipios. ¿Y el saldo dónde está?
Andrés Trujillo Mosquera